Una mujer de 101 años que vive en una residencia de ancianos se convirtió este sábado en la primera ciudadana alemana en recibir la vacuna contra la covid-19, un día antes del inicio oficial de la campaña de vacunación en Alemania.

Edith Kwoizalla, de un asilo de Halberstadt (este del país) recibió su primera dosis de la vacuna desarrollada por la farmacéutica alemana BioNTech y su socio estadounidense Pfizer. Le siguieron otros 40 residentes y diez empleados de ese hogar de ancianos del 'Land' de Sajonia Anhalt, informaron las autoridades regionales.

Este domingo arranca oficialmente la campaña de vacunación en Alemania, al igual que en la mayoría de los países de la Unión Europea (UE). El Gobierno alemán espera distribuir antes de fin de año 1,3 millones de dosis entre los 16 estados federados, a cuyas autoridades sanitarias corresponde proceder a la vacunación de sus ciudadanos.

El objetivo del gobierno es poder ofrecer a todos los ciudadanos la opción de vacunarse hacia mediados del próximo año, explicó el ministro de Sanidad, Jens Spahn, ante el inicio de las operaciones. Tras la fase de arranque, que tendrá lugar directamente en las residencias de ancianos, se seguirá con la vacunación en los centros distribuidos para esos efectos en todo el país. Se espera llegar a administrar unas 700.000 dosis semanales a partir de enero.

Como en la mayoría de países de la Unión Europea (UE), será una campaña gradual que empezará por los grupos más vulnerables -residentes en geriátricos, mayores de 80 años y personal sanitario más expuesto a infecciones. Alemania se ha asegurado 300 millones de dosis, a través de la UE o por contratos propios, para cubrir las necesidades del país de mayor peso demográfico del bloque comunitario -83 millones de habitantes.

El temor a nuevos máximos

El Instituto Roberto Koch (RKI), competente en la materia en el país, notificó este sábado 14.455 casos de la covid-19 y 240 víctimas mortales verificados en las últimas 24 horas. Un cómputo incompleto, según ha advertido dicho organismo, ya que en estos días festivos se hacen menos test y no se actualizan todos los datos.

La estadística acumulativa hace temer nuevos picos la próxima semana. Hasta ahora, el máximo en un día fueron 33.777 contagios -el viernes día 18- y 962 fallecidos -el pasado miércoles-. El total de positivos en toda la pandemia se sitúa en 1.627.103 -de los cuales, 1.206.200 son pacientes recuperados- y el de fallecidos en 29.422.

No hay perspectiva clara para un levantamiento general del cierre de la vida pública implantado el 16 de diciembre. Ese día quedaron cerrados los comercios no esenciales -aunque siguen abiertos tiendas de alimentación y demás productos de uso diario, ópticas y ortopedias, farmacias, bancos, correos, gasolineras y, en algunos estados, las librerías. El 2 de noviembre había quedado ya cerrado todo el ocio nocturno, la vida cultural -desde museos a salas de conciertos, cines y teatros- y la gastronomía -solo se puede servir comida para llevar-. No ha habido restricciones a escala nacional para actividades individuales al aire libre, como el deporte.

Esta situación va a prolongarse al menos hasta el 10 de enero, según el consenso alcanzado por el gobierno de la canciller alemana, Angela Merkel, y las autoridades locales.