Año tras año, al inicio del nuevo curso, los niños y niñas renuevan su ilusión. Una mezcla singular de sentimientos, de inquietudes y de propósitos que regresa puntualmente en estos primeros días de septiembre a todos los hogares con miembros en edad escolar. Reencontrarse con los compañeros, conocer a los nuevos alumnos o iniciar una nueva etapa educativa supone un cúmulo de emociones que, aunque conocidas, suelen vivirse de una forma especial por todos los que integran la comunidad educativa del Colegio Internacional Meres. “Tenía ganas de empezar el cole para ver a mis amigos”, aseguraba Sofía García, de 6º de Primaria, mientras que Claudia Argüeso, de 5º, no ocultaba tener curiosidad “por saber el profe que me iba a tocar”.

Un grupo de alumnos del Colegio Internacional Meres al comenzar las clases. | cedida a Lne E. CASERO

Profesores y personal del colegio disfrutan mucho viendo como el paso de los meses de verano ha hecho mella en sus alumnos, que vuelven más mayores, más maduros y con ganas de empezar de nuevo. “Tenía ganas de saber en qué grupo me había tocado y me apetecía ver ya a mis amigos”, apuntaba Pablo Mota, que acaba de comenzar 1º de ESO.

También las familias, que no pueden evitar su inquietud por este arranque escolar, especialmente en una época donde los horarios y rutinas aún no se han podido normalizar como a todos los gustaría. Inquietas, pero también confiadas, pues tienen la total seguridad de que sus hijos e hijas disfrutarán de una óptima experiencia a nivel tanto personal como formativo. Crecimiento y aprendizaje, una vez más de la mano.

El pasado 6 de septiembre recibieron a los primeros alumnos, en este caso, los de Educación Infantil, a quienes en las jornadas posteriores se unieron los de Primaria, Secundaria y finalmente los de Bachillerato, los últimos en retornar a las aulas. Todos ellos están siguiendo, y deberán seguir haciéndolo, el protocolo propio del centro que se impuso al inicio del curso pasado, para garantizar la máxima seguridad. Un protocolo del que disponen odas las familias y en el que se incluye dónde y cuándo se deben llevar las mascarillas; cuándo y cuántas veces se deben lavar las manos; los diferentes caminos trazados para que circulen los alumnos; o cómo se debe proceder en el comedor o en los autobuses, entre otras medidas. Una guía cuyo objetivo principal es describir las medidas necesarias para garantizar las condiciones de seguridad y salud de sus alumnos, familias y trabajadores para el desarrollo de la actividad docente presencial.