Tiene 53 años, le gustan los SUV y tarda dos meses en cerrar la compra. Según un estudio del departamento de investigación de mercados de Seat, éste es el perfil típico de los nuevos clientes del sector de la automoción en Europa. En el caso de Seat, la edad media de sus compradores baja hasta los 44 años. Pero, ¿cuál es el motivo de comprar un coche? ¿Qué características se consideran prioritarias?

El tamaño y tipo de carrocería, la motorización y el precio, lo primero que se decide cuando se quiere comprar un coche.

El automóvil es la segunda inversión más importante que se hace después de la vivienda. Para el 55% de los compradores, el kilometraje y la antigüedad de sus vehículos son los motivos que impulsan la compra de un nuevo modelo. Un 20% de las ventas viene motivada para ganar en aspectos como la seguridad, más espacio, reducir el consumo o tener un coche con la última tecnología. Asimismo, un 15% alega motivos familiares, ya sea porque llega un nuevo miembro a la familia o porque cambia de estado civil. También influyen otros motivos personales como un cambio de trabajo o la finalización de los estudios (10%).

Hasta ocho semanas puede alargarse el proceso de compra. La primera decisión que se toma es el tamaño y el tipo de carrocería. El 45% de los compradores empieza fijando este criterio. Un 24% de los clientes decide primero el tipo de motor (diésel, gasolina o híbrido), mientras que un 17% lo primero que tiene claro es el presupuesto y un 14%, la marca. En este sentido, el 55% de los futuros compradores que opta por una marca cambia de preferencia a lo largo del proceso.

Finalmente, más de la mitad de los clientes utilizan el configurador de la web del fabricante antes de acudir al concesionario y uno de cada tres compradores opta por coches que ofrecen una posición de conducción elevada, como los SUV.