El Ayuntamiento de San Martín del Rey Aurelio ha puesto en marcha los trámites para la instalación de cámaras de videovigilancia en el parque del Florán, entre Sotrondio y Blimea. La finalidad es prevenir los actos vandálicos como los que se vienen produciendo en los últimos años de manera reiterada y que están ocasionando importantes costes económicos, como consecuencia del gasto en la reposición de farolas, bancos, papeleras y cristales, entre otros elementos. El Consistorio está actualmente en contacto con Delegación de Gobierno para conseguir los permisos necesarios que permitan poner en marcha la medida.
Así lo explicó el regidor de San Martín, Enrique Fernández. "Tenemos unos problemas muy serios en el parque del Florán, que quizá sea la zona más castigada ahora mismo. Todo el proceso de instalación de videocámaras es muy garantista y conlleva pedir una serie de permisos y un trabajo previos, que es el que estamos haciendo con Delegación del Gobierno, justificando la necesidad e informando de las zonas en las que se van a ubicar esas cámaras", apuntó el regidor.
Fernández expuso que se preservará la privacidad de los vecinos. En esta línea argumentó que "la ciudadanía no debe preocuparse. No se les va a meter es unas especie de Gran Hermano de la noche a la mañana". Y añadió: "Se van a señalizar las zonas que estarán videovigiladas. A los únicos que va a perjudicar esto es a los que están comportándose como no se debe". La idea del Ayuntamiento es poner en marcha la medida en el Florán, aunque no se descarta que, en un futuro se extienda a otras zonas del concejo, según apuntó el regidor.
La instalación de las cámaras tiene como principal objetivo poner freno a los daños que están ocasionando los actos vandálicos en el municipio. "El vandalismo siempre fue preocupante, pero es más frustrante en un momento como el actual en el que hay pocos recursos. Es como tirar el dinero al río porque haces un desembolso y vienen estas personas a destrozártelo. Haces una reparación y te dura dos días". El gobierno socialista entiende que la medida puede resultar efectiva, ya que consideran que los costes de la instalación de videovigilancia y su mantenimiento "van a ser siempre menores que los propios de la reparación o la reposición de los bienes dañados".
