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Habla una alumna asturiana sobre el fraude en los exámenes: "No pensaba copiar, pero utilicé la tablet"

"Ha sido una prueba a pillar, si fuese presencial no sería tan rebuscada", recalca una universitaria de la región

Labores recientes de desinfección en la Universidad de Oviedo Miki López

La pandemia del coronavirus ha trastocado el entorno universitario. Todas las instituciones académicas del país se han visto obligadas a modificar calendarios e interrumpir las clases y los exámenes presenciales por el coronavirus. La Universidad de Oviedo, tras semanas de enfrentamientos entre el alumnado y el Rectorado, arrancó esta semana los exámenes, y, una de las preocupaciones en el profesorado, y fuente de conflictos, tiene que ver con el posible fraude en las pruebas. Los alumnos, incluso, llegaron a tildar de “paranoia” la preocupación de los profesores. Y lo cierto es que los fraudes en las pruebas, con o sin coronavirus, con exámenes presenciales o desde casa, siguen estando presentes.

“Me puse la Tablet al lado del ordenador y fui buscando palabras clave para responder a las preguntas tipo test. Ya sé la nota y he aprobado”, lo dice una alumna de una disciplina de la Universidad de Oviedo que por primera vez tuvo que hacer frente, con éxito, a un examen no presencial desde casa. “No pensaba copiar y no lo tenía planeado, de hecho, pensé que nos harían activar la cámara del ordenador y nos grabarían, pero no fue así. De todos modos, si no estudias absolutamente nada da lo mismo copiar, porque debes saber lo mínimo y donde están las cosas”, recalca.

Esta alumna, que confirma la preocupación latente de los profesores ante los posibles fraudes, cree que el nivel de dificultad en las pruebas ha aumentado precisamente por ese temor. “Las preguntas eran difíciles, muy rebuscadas, como a pillar. Creo que si el examen hubiese sido presencial no sería así de complicado”, finaliza.

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