Pola de Somiedo,

V. DÍAZ PEÑAS

El alcalde de Somiedo, Belarmino Fernández Fervienza (PSOE), negó ayer tajantemente que el turismo afecte al oso en relación a la polémica suscitada en los últimos días en torno a posibles visitas guiadas para observar al plantígrado en el parque natural. «Decir que el turismo es ahora un impedimento para la conservación del oso es una falacia. En Somiedo llevan años conviviendo dejando, tras de sí un beneficio mutuo», añadió.

Fervienza manifestó que es falso que en el último plan de uso y gestión del parque natural de Somiedo se permitan visitas guiadas por zonas de uso restringido y matizó que el Ayuntamiento nunca las consentirá. «Es incierto que haya empresas realizando rutas por zonas prohibidas para los turistas. Si ello fuera así seríamos los primeros en denunciarlo. Sólo se permiten las rutas que hace todo el mundo, como llevamos haciendo muchos años», matizó el socialista.

El regidor, que ve «legítima» la utilización del oso como reclamo turístico, contestó a las palabras de los grupos conservacionistas que afirmaban que el turismo afecta al oso. Según Fernández Fervienza esta aseveración no tiene lógica en un lugar como Somiedo, que en 20 años ha conseguido gracias a una buena gestión que la población osera haya mejorado. «También ha sido importante la labor de concienciación social. Nos hemos convertido en una referencia del turismo rural y de naturaleza y la situación del oso dista mucho de los inicios del parque», puntualizó el Alcalde.

En este sentido Fervienza recordó que este mismo año se cumplirán 20 años de la declaración del territorio somedano como parque natural que buscaba la protección del oso. «Nos caracterizamos por ser uno de los espacios protegidos más restrictivos. No permitimos actividades deportivas más allá del senderismo, los paseos a caballo o bicicleta de montaña. El uso turístico del territorio siempre ha sido en pro de la conservación», señaló.

Respecto a la muerte de un oso durante el proyecto de radiomarcaje, el Alcalde recordó a los conservacionistas que en ningún momento acusó a nadie de la muerte del oso. «Dije que durante el proyecto murió un ejemplar. De ahí que el Ayuntamiento no permita, después de esta nefasta experiencia, más iniciativas similares. Esto sí que afecta al oso y no el turismo», concluyó el regidor somedano.