La agrupación local de Izquierda Unida en Navia denuncia el "auténtico despropósito que está siendo la obra de la cogeneradora" de biomasa que se pretende instalar en las inmediaciones de las instalaciones deportivas, tras dar a conocer que la Intervención municipal ha paralizado el expediente de cimentación de la planta, obra ejecutada por el Consistorio. La razón es la supuesta ausencia de proyecto para la obra y los sobrecostes acumulados de 5.000 euros, que el gobierno local, apoyado en los técnicos responsables, deben ahora justificar.

La coalición explica que "los técnicos municipales plantean un reparo al expediente, lo que en la práctica supone la paralización de toda tramitación relacionada con la cimentación de la caldera". El partido critica que el equipo de gobierno haya comenzado las obras "sin presentar proyecto, ni tan siquiera una memoria valorada", y que en la ejecución de las mismas se hayan sobrepasado algunas partidas "en casi un cuarenta por ciento". Todo ello lleva a la suspensión de la tramitación del expediente "hasta que dichos defectos sean subsanados o se dicte una resolución ejecutiva por parte de la alcaldía".

"Estamos ante un desaguisado más en todo el asunto de la planta de cogeneración, ampliamente rechazada por los vecinos, y que es un ejemplo de libro de cómo no se deben de gestionar los asuntos públicos", remata IU.

El regidor naviego, Ignacio García Palacios, explica que la obra de cimentación "es el aporte que debe hacer el Ayuntamiento para la planta de biomasa", que la parte municipal ronda los 15.000 euros de una inversión total de 1,7 millones y que existe un proyecto perfectamente detallado del proceso. "Daremos respuesta al reparo, presentando el documento del proyecto y justificando los costes añadidos", afirma García Palacios, que subraya que tan sólo se ha paralizado la parte referida a la cimentación. El resto de la obra, así como el chequeo de la caldera, continúa su proceso normal.

Los citados sobrecostes los achaca el regidor a la necesidad de utilizar más hormigón del inicialmente presupuestado, "quizás unos quince o veinte metros cúbicos más", calcula García Palacios.