La Quinta de los Selgas, en Cudillero, pierde tirón. Las visitas al palacete de El Pito -con un destacado patrimonio artístico-, que permanece habitualmente cerrado, se han estancado en junio. La Fundación Selgas-Fagalde, gestora de la herencia de los hermanos Ezequiel y Fortunato, abrió el martes el recinto -una apertura bienal desde 2012-, pero la afluencia no ha sido la esperada.
Así lo admitió ayer el alcalde, Ignacio Escribano, que asistió a una reunión del patronato con motivo de la fiesta de San Juan. Según Escribano, confían en que en julio y agosto llegue el grueso de visitas.
Este verano estará abierta hasta el 30 de septiembre, de martes a domingo. "Creemos que todavía hay mucha gente que no sabe que se puede visitar", indicó el regidor, quien pese a las escasas reservas de junio confía en el tirón turístico de este atractivo complejo en pleno periodo vacacional. De hecho, la decisión de reabrir el palacio a las visitas este verano generó gran satisfacción en el sector turístico del concejo, que ven a los Selgas como uno de los principales ganchos para atraer visitas.
La Quinta cerró ayer sus puertas para festejar San Juan. A esta celebración solo tienen acceso los miembros del Patronato y personalidades invitadas. El encuentro sirve para recordar a la familia. Tras la reunión, se celebró una misa y se sirvió un almuerzo. En su testamento los hermanos dejaron constancia de su deseo que de festejar todos los años este santo, algo que se cumple.
La fiesta de San Juan también se celebra en El Pito, donde se ubican la quinta, sus jardines y el pabellón de tapices, así como otros edificios cuya construcción impulsaron los Selgas, como la iglesia o las antiguas escuelas, hoy instituto de secundaria.
En El Pito los vecinos siguen hoy con la fiesta de San Juan. Habrá una misa a la una de la tarde, cantada por el Coro de Oviñana y seguida de procesión. Habrá juegos infantiles y una verbena para despedir los festejos.
