La localidad allandesa de Berducedo reabrió ayer su consultorio médico totalmente reformado, después de someterse a una obra de remodelación que comenzó el pasado mes de octubre y a la cual la Consejería de Sanidad destinó 198.606 euros, un presupuesto cofinanciado por la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder).

El edificio, que abrió ayer sus puertas al público por primera vez desde que se iniciasen los trabajos, acogió a un gran número de vecinos que no querían dejar pasar la oportunidad de ver cómo habían quedado las instalaciones. Todos coincidieron en destacar lo necesaria que era la rehabilitación del consultorio y en lo funcional que había quedado tras la obra. "No parece el mismo, ahora está bien distribuido y con mucho gusto", destacó la vecina Angelina Lombardero. Para ella, lo más necesario era la mejora del acceso, renovar el tejado y el aislamiento del edificio "para ahorrar y estar cómodos".

El principal objetivo de la obra fue hacer el edificio más accesible. Para ello, se modificó la entrada con la sustitución de la rampa que había por una más larga que no supera el seis por ciento de pendiente.

También se eliminó el cortavientos que dividía en dos la primera planta, la del consultorio, y para cumplir su función se colocó una caja de vidrio en la entrada al edificio. Este cambio permite que ahora la sala de espera esté en un mismo local y sea mucho más amplia.

Además, se renovaron las consultas, habilitando una para medicina y otra para enfermería, y los baños. Asimismo, la obra incluyó la reforma de la planta superior, donde se encuentra la vivienda habilitada para los profesionales, que se ha dividido en dos apartamentos.

"Esta obra era muy necesaria porque las instalaciones eran antiguas, estaban deterioradas y este pueblo es la segunda población más importante del concejo, además de ser paso de peregrinos hacia Santiago de Compostela", recalca Manuel Herías. De hecho, el consultorio de Berducedo tiene adscritas 328 tarjetas sanitarias, y además da servicio a los centenares de peregrinos que transitan por la zona, sobre todo en época estival.

Herías, vecino de Berducedo, añade que contar con un consultorio adaptado a los nuevos tiempos y cómodo permite mirar al futuro a los vecinos de la zona. "Es importante que la gente, sobre todo los jóvenes, vean que hay unos servicios mínimos para poder seguir viviendo aquí y que los profesionales trabajen a gusto", recalca.

Con el consultorio nuevo, a los vecinos les gustaría solucionar las pocas horas de servicio farmacéutico de que disponen. Cuentan con un botiquín que abre tres días a la semana durante dos horas, una atención que consideran insuficiente. "Es un problema importante, la ley debería adaptarse para facilitar el acceso a los medicamentos en localidades pequeñas porque es contradictorio tener un consultorio y tener que ir a la Pola (a una distancia de 24 kilómetros) a buscar las medicinas", se queja Manuel Herías.

En la reapertura del consultorio estuvo el consejero de Sanidad, Francisco del Busto, que aseguró que el modelo desarrollado en Berducedo se está repitiendo en otros lugares y, precisamente, en el área sanitaria II se llevará a cabo una obra similar en el consultorio de Tormaleo, en el concejo de Ibias. "Antes de finalizar el año empezaremos las obras en Tormaleo, donde se hará algo muy parecido, una remodelación completa en el consultorio y en la vivienda del médico", señaló del Busto.