El futuro del llamado Casino de Luarca todavía no está decidido. Los socios de la Sociedad Círculo Liceo celebraron anteayer por la noche una asamblea para tratar, por segunda vez en menos de un mes, la cesión de las instalaciones al Ayuntamiento de Valdés, pero este punto no salió finalmente aprobado.

En la cita, celebrada a puerta cerrada, sí se renovó la junta directiva. El nuevo presidente es Marino Guardado, quien indicó a este diario que la cesión del edificio al Ayuntamiento "todavía no es definitiva". Según Guardado, es "prematuro" hablar de una decisión firme. De hecho, la nueva directiva estudiará minuciosamente la propuesta y sus consecuencias y, en la fecha que corresponda, "convocará una asamblea extraordinaria para votar". Siempre se respetará, según Fernández, la voluntad de los socios.

Uno de los asuntos que se tratan es la posibilidad de disponer de una sala para uso exclusivo de los miembros de la Sociedad. Y es que las 52 personas que están al corriente de pago no quieren renunciar a cierta exclusividad, precisamente por ser eso: socios con cuota de pago anual.

La intención de la antigua directiva, según el gobierno local, pasaba por dejar en manos del Ayuntamiento de Valdés las obras y el mantenimiento de la infraestructura. A cambio, las instalaciones se abrirán al público general. El Casino de Luarca se convertiría así en un centro cultural "de primer orden para Valdés", según el concejal de Cultura, Gumersindo Cuervo.

Se sabe que el edificio tiene que cumplir con la normativa actual y, por tener más de cincuenta años, debe someterse a una rigurosa inspección técnica para asegurar, entre otros asuntos, su conservación. En el caso del Casino y, según fuentes municipales, es necesario dotar la instalación de un ascensor. También se debe comprobar el estado de la fachada y han de mejorarse algunas zonas del complejo para evitar derrumbes. Una reforma austera, según las mismas fuentes, rondaría los 350.000 euros. En el caso de una obra integral, se necesitaría casi un millón de euros.

Si se logra la cesión, el Ayuntamiento solicitará la colaboración del Principado para hacer frente a las reformas. El edificio fue diseñado por el arquitecto Manuel del Busto. El solar se compró en 1910. Los fundadores participaron con cédulas hipotecarias de 80.000 pesetas. En la actualidad, los gastos del complejo superan los ingresos.