La Unión Independiente de Transportistas Autónomos (UITA Asturias) está dispuesta a paralizar el suministro de madera a las plantas de Ence en Navia y Pontevedra si la empresa no reconsidera la ruptura de su relación con un transportista gallego que el pasado 25 de octubre agredió a unos ciclistas cerca de la factoría pontevedresa.

Los transportistas justifican la medida en la falta de respuesta de Ence a sus demandas, que pasaban por rectificar la decisión de la empresa de "dificultar el desempeño profesional" del camionero. A juicio de la plataforma, la difusión del vídeo del altercado "generó un ruido que se saldó con un castigo excesivo". Los representantes de los transportistas mantuvieron un encuentro con la empresa el pasado 4 de diciembre, pero ante la falta de respuesta han decidido "dar un paso más".

Por su parte, Ence subraya que "la agresión del transportista no se puede justificar de ningún modo", y recalca que se trata de "una persona reincidente", que ya agredió a un empleado en 2015 y estuvo un mes sancionado por ello.

La empresa asegura que no impide que el transportista trabaje para otras empresas, y que la única condición que pone es que no acceda a las instalaciones. Además, critica que la plataforma defienda "actitudes que van contra los valores cívicos".