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"No hubo ningún diálogo", se quejan los expropiados del paseo marítimo de Navia

Los propietarios critican la falta de respuesta del Ayuntamiento a sus alternativas y afean a IU su cambio de postura una vez en el gobierno

El actual proyecto de paseo marítimo de Navia, que tendrá seis metros de ancho y comunicará de momento la Dársena con el parque Ramón de Campoamor, no gusta a los propietarios, que ven cada vez más cercana la "expropiación forzosa y no negociada".

El más afectado es David Martínez, quien observa "incongruencias" entre el proyecto y la legalidad. En su caso particular, asegura que el gobierno naviego pretende actuar en el entorno y demoler parte de una terraza de una propiedad protegida que forma parte del catálogo urbanístico y del inventario del Principado. "Todo son mentiras", confiesa indignado Martínez, para quien las gestiones para que la Demarcación de Costas pueda disponer de los terrenos fueron largas, tediosas y poco amigables con los dueños de las fincas afectadas.

El proyecto, en el que se trabaja desde hace dos décadas, prevé por lo pronto expropiar a cinco propietarios de los solares que se encuentran entre la Dársena y el parque Ramón de Campoamor. Al fracasar la negociación, tras un proceso judicial emprendido por un propietario, el Ayuntamiento decidió abandonar la unidad de actuación y pasar a la vía de la expropiación. Fue Sopegsa la encargada de valorar los terrenos sobre los que se construirá este tramo del paseo. En su informe, la sociedad propone pagar 246.209,9 euros para los primeros cinco propietarios afectados, algo que se rechaza.

"Desde hace más de 20 años propusimos hacer el paseo pivotado, sobre la ría, ofreciéndose los vecinos a colaborar en el arreglo de las fachadas, pero siempre se nos negó esta opción sin explicarnos por qué", añade Martínez. Los afectados también apoyaban una estructura con soportales "como está en el inicio del paseo, de manera que en la parte superior se pudiese conservar nuestra terraza", detalla. "No tuvimos respuesta, ni a favor ni en contra", añade Martínez.

Los propietarios critican además el cambio de opinión de Izquierda Unida, ahora socio de gobierno del PSOE. Si antes de formar parte del ejecutivo consideraba que los gobernantes "tenían que apostar por una solución dialogada, ahora en el gobierno mira para otro lado", se quejan.

El paseo marítimo es una construcción prevista en el plan de fachadas que pretende comunicar, según el proyecto inicial, el tramo de ría comprendido entre la Dársena y El Fornel. Esta desarrollo se encontró en los últimos años con el rechazo de los propietarios de las fincas afectadas.

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