La situación que vive el PP asturiano tiene algo de teológica: es uno y trino. Hay un PP de Teresa Mallada (candidata autonómica) ávido de conquista autonómico, otro PP de Mercedes Fernández (presidenta del partido) que relame sus heridas y cuenta agravios esperando mejores tiempos, y un tercero de Paloma Gázquez (candidata al Congreso) que busca su espacio propio como puede. Por medio, rumores, maledicencias, psicosis, agendas imposibles, incompatibilidades y "fake news". Los rumores más sorprendentes se han ido escuchando estos días, desde advertencias de vídeos capaces de fulminar carreras políticas hasta cambios de partido de dirigentes populares orillados, que presuntamente están dispuestos a pasarse a otras siglas y amarran ya su salto último. Por medio, tambores constantes de crisis inminentes y apocalípticas anticipadas por nubarrones que no pasan del horizonte. Y como telón de fondo, la presunta jugada maestra final de un pacto con Foro para las autonómicas que todas las partes niegan de manera tajante.
Sin siquiera haber entrado en campaña, el Partido Popular en Asturias da la impresión de nadar en un mar de falsas noticias y chismes, de leyendas urbanas que van y vienen con versiones discrepantes y variopintas. Algunas de los cotilleos llegan a cotas muy teatrales, como el pronóstico de un Pablo Casado anunciando públicamente para sorpresa de todo el mundo decisiones que sacudirían al partido hasta anegarlo con la voracidad de un tsunami. Pero, mientras, donde el PP hace aguas es en Gijón, al tiempo que se viven discrepancias en varias juntas locales. ¿Qué agita los cotilleos en el partido? Es obvio que han de tener un origen, otra cosa es que los propios sean los que más se encargan de difundirlos.
El PP asturiano fibrila y atraviesa una profunda ruptura de la manera más callada porque los tiempos electorales no son momentos para andarse con tonterías. Tanta presión y psicosis internas acabarán reventando por algún lado. Para echar más leña al fuego de la salud popular, Podemos quiere presentar hoy una denuncia en Fiscalía contra la candidata autonómica, Teresa Mallada. Se buscan ansiolíticos.
