Un negacionista es, simplemente, alguien que niega la evidencia racional de algo. La evidencia puede ser de tipo científico (la evolución de las especies), empírico (el cambio climático), sanitario (el coronavirus), histórico (el Holocausto), etcétera, pero aunque ese etcétera es muy largo el negacionista suele negar a la vez muchas de ellas. Aunque el origen del negacionismo es por ahora desconocido por la ciencia, cabría pensar que se trata de un remanente anterior al imperio de la razón que ha quedado emparedado en capas profundas de la mente individual y colectiva, como esas bolsas de gas almacenadas en los estratos de carbón. Todas las religiones reveladas son negacionistas, así que la tierra está abonada. No obstante, algunas se han rendido a la evidencia, aunque sea en parte, como ocurre con las que predominan en Occidente. Demos gracias cada día a Dios de que sea así.
