Construir un brazo robótico y controlarlo a través de una aplicación con el móvil es sólo una de las muchas actividades previstas por los alumnos de la asignatura optativa Industria 4.0: fabriquemos robots, que este año estrena el Instituto Rey Pelayo de Cangas de Onís.
La materia, impartida por la profesora Lourdes Álvarez, busca que los alumnos de 4.º de ESO conozcan las instalaciones que tiene el centro para dar la formación profesional de Mantenimiento electromecánico. "Otro objetivo que nos planteamos fue que pudiesen entender el cambio que está produciéndose hoy en día en la industria, con todo lo que esto conlleva: máquinas más eficientes y procesos productivos flexibles capaces de atender a demandas especializada", indicó la educadora.
Los 29 matriculados con los que cuenta la materia -divididos en dos grupos- ya han aprendido cosas tan prácticas como a cambiar un enchufe estropeado o colocar un interruptor y en pocas semanas se iniciarán en la fabricación aditiva (impresión 3D) así como en el funcionamiento de robots que ya están siendo realidad en muchas fábricas. Los jóvenes, que estos días practican con tableros de electrificación de viviendas, destacan la utilidad de la asignatura para la vida diaria en general y para su futuro profesional en particular. "Es interesante porque vas rotando y tocas todos los palos, desde el mantenimiento de instalaciones eléctricas y neumáticas hasta el mecanizado y la soldadura", indicaron estudiantes como Adrián Calvo y Alejandro Mier. Para alumnos como Ángel Rodríguez, de 15 años de edad, que tiene claro que en el futuro se dedicará a la mecánica, esta optativa (que se imparte tres horas por semana) ofrece "formación práctica que no tienen otras ofertadas como plástica o cultura clásica. La asignatura goza de gran aceptación entre las féminas (hay diez inscritas) que ven en la formación profesional una oportunidad. "La robótica y la programación suponen un reto", aseguran algunas como María Santagüida y Nuria Martínez.
