Cinco meses después de su comienzo y con dos de retraso acumulado, las obras en la calle Pidal, principal entrada a Llanes por la parte oeste, han llegado a su fin para alegría de vecinos y empresarios. Éstos sostienen que la tardanza a la hora de rematar los trabajos ha perjudicado a sus negocios
Juanjo Rodríguez regenta el bar La Puerta del Sol. "Algo ha fallado. No puede ser que el Ayuntamiento diga que van a tardar 3 meses y las obras se prolonguen por espacio de 5", dice. Cree que el equipo de gobierno debió estar más cerca de empresarios y vecinos. "Hubo dejadez. Echamos en falta más limpieza cuando no se trabajaba y que regasen la calle", sostiene.
Desde 2007 Víctor Correa tiene una carnicería en la zona. "Tantos meses para arreglar 150 metros de calle me ha parecido mucho", señaló. Cuenta que debido a las obras ha tenido incluso que cerrar el negocio durante varios días "pues nadie pasaba por aquí". El responsable de la cafetería Madison, Javier Alvar González, dice que "la obra ha sido larga pero estamos satisfechos con el resultado". Indica también que la tardanza en terminar ha repercutido en los negocios. "El tráfico estaba desviado y nadie pasaba por aquí. Se ha tardado mucho en acabar en relación al tiempo que se dijo que iba a durar", dice.
"A nosotros no nos ha afectado en ventas, pero entiendo que a los bares si", dice Esther Rozas, responsable de una tienda de telefonía móvil. Cree que la calle necesitaba un lavado de cara para dar vida a esta parte de la villa. "Ha sido como la obra del Escorial, pero hacía falta mejorar la calle", manifestó una vecina.
En la jornada de ayer varios operarios remataban los trabajos con la colocación de señales verticales y el pintado de la calle, que abrirá al tráfico en las próximas horas. La obra, financiada por el Ayuntamiento de Llanes y ejecutada por Asturagua SICA SAU, ha tenido un presupuesto de 194.596,74 euros. Del tramo de acera mejorado junto a la rotonda de la estación de autobuses se encargó personal municipal.
