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Comienzan las obras para reparar los hundimientos de la carretera del Pontón

Vecinos de Campurriondi reclaman poder pasar a pie hasta el pueblo para evitar dar un rodeo de 13 kilómetros con el coche por Argolibiu

Las obras para reparar los deslizamientos de tierra registrados en la carretera del Pontón (N-625), que une Cangas de Onís y León pasando por Amieva, comenzaron ayer entre gran expectación por parte de los vecinos.

A primera hora de la mañana hicieron acto de presencia las palas encargadas de sanear los desprendimientos, registrados a la altura de Campurriondi. Los trabajos incluyen la instalación de una malla metálica que frene la caída de piedras y la construcción de voladizos metálicos sobre el río Sella, entre otras cosas. El Ministerio de Fomento tiene previsto invertir más de un millón y medio de euros en la reforma, que obligará a restringir la circulación de tráfico, al menos, hasta el 17 de este mes.

La intención de los operarios es la de concluir en una primera fase, antes de que comiencen las vacaciones de Semana Santa, la colocación de la malla antidesprendimientos con el fin de ganar seguridad en la zona. Para ello precisan realizar cortes entre los kilómetros 140,3 al 140,4, de lunes a viernes, entre las 8.00 y las 20.00 horas.

Fuera de este horario, así como sábados, domingos y festivos, se mantendrá el corte total de la calzada para vehículos pesados. Los ligeros contarán con un carril, de circulación alternativa para ambos sentidos, regulada por semáforos.

Mientras tanto, una señal advierte a la altura del puente que da acceso a Sellañu (Ponga) de la obligación de tomar un desvío alternativo. Así, para llegar a Campurriondi es necesario transitar por Cirieñu, Pen, Villaverde, Argolibiu y Vega de Cien, lo que supone alargar el recorrido en unos trece kilómetros. Ante esta tesitura, algunos vecinos reclamaban ayer el poder aparcar en el apartadero donde se produce el corte de la carretera (viniendo desde Cangas) y pasar a pie hasta sus casas, situadas a escaso medio kilómetro, evitando dar el rodeo por Argolibiu. Las obras de reparación de la carretera N-625 eran muy demandadas por los lugareños, que llegaron a manifestarse el pasado 8 de marzo. Los hundimientos registrados en enero a causa del temporal impedían el tráfico rodado de vehículos de grandes dimensiones por Campurriondi. Para cruzar a León estos debían circular desde entonces por San Xuan de Beleño, Viegu y Vidosa.

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