El texu, árbol sagrado de los astures, será el símbolo vivo de la pandemia de covid-19 y el homenaje perenne de Asturias a las víctimas del coronavirus. Cinco tejos plantados frente al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), en el entorno de la capilla, constituyen el memorial que el Principado inaugurará en una sencilla ceremonia mañana, viernes, al mediodía. En ella participarán unas 70 personas, principalmente autoridades, y están invitados los expresidentes regionales.
Uno de los cinco tejos, el de mayor tamaño, ha sido bautizado como el "tejo de la memoria". Una placa en castellano y asturiano (El tejo de la memoria / el texu de l'alcordanza) quedará como testigo de su significado.
El presidente del Principado, Adrián Barbón, abrirá el acto con una intervención a la que seguirá la lectura de un poema. Frente al denominado "tejo de la memoria" se depositará un ramo de flores y, posteriormente, se escuchará el himno de Asturias. Fue precisamente Barbón quien propuso establecer un "monumento" que quedase como recuerdo de los efectos de un virus que ha sido letal para 339 asturianos y al menos 28.392 españoles, y que también ha sacudido la normalidad colectiva. En una entrevista con LA NUEVA ESPAÑA el pasado 14 de junio, el presidente del Principado adelantó que se inclinaba por la plantación de árboles en el entorno del HUCA para ese homenaje. "Hay quienes piensan en un memorial vivo, y eso me gusta. Esto ha sido un hito que pasará a los libros de Historia. Quisiera que cuando ninguno de nosotros estemos exista ese memorial que recuerde que 2020 fue distinto. Merece la pena dejar esa especie de mensaje en una botella", aseguró entonces Barbón. La especie elegida ha sido el tejo por su carga simbólica. Vinculado al ciclo de la vida y la muerte, su longevidad (puede llegar a vivir mil años) lo ha convertido en metáfora de la eternidad, por lo que su presencia ha estado históricamente asociada a lugares sagrados en muchas culturas.
