La llegada masiva de autocaravanas, caravanas y furgonetas del denominado "turismo camper" ha causado sensación en la comarca durante lo que va de verano. Y la actitud incívica de muchos turistas que eligen viajar y pernoctar sobre sus cuatro ruedas es directamente proporcional a la crítica y queja de los vecinos de distintas zonas del oriente de Asturias.

Lo que molesta a estos vecinos, y también han denunciado ya algunos políticos, no es la proliferación de este turismo, sino el uso de zonas no permitidas para la pernocta y que el depósito de excrementos y basura se deje en los espacios públicos.

En el pueblo de Sotres, donde también ha crecido este turismo de forma exponencial, la asociación vecinal ha colocado carteles denunciando esta actitud y pidiendo a los usuarios de este tipo de vehículos respeto para con los vecinos de la localidad. Sucede lo mismo en distintos lugares de Llanes como puede ser el mirador de La Boriza o zonas cercanas a las playas que están sin regular para este tipo de turismo. "Hay papeles, excrementos, residuos...", lamentan los vecinos y paseantes que cada mañana se encuentran "con estos restos orgánicos y el olor que producen allá donde los dejan". Es, según dicen, "vergonzoso y dice muy poco de esta gente".

Desde el Club Autocaravanista del Principado de Asturias defienden que "no siempre estos residuos son de este tipo de turismo, las autocaravanas tienen servicios para evitar, precisamente, este tipo de suciedades, entre otras cosas tienen váter, así que carece de sentido meter a todos en el mismo saco", defiende su presidente, José Luis Villares.