El Ayuntamiento de Llanes exigirá a la Confederación Hidrográfica del Cantábrico una solución definitiva y urgente para las inundaciones que se registran frecuentemente en el acceso a las localidades de Soberrón y La Galguera desde la N-634. El concejal de Obras llanisco, Juan Carlos Armas, aseguró que el Gobierno local ya reclamó anteriormente a la Confederación, sin que este organismo haya hecho “nada” para resolver un problema que provoca inundaciones en domicilios y cortes de carreteras y caminos.
Aunque el arroyo Mesa siempre registró desbordamientos, hasta que concluyeron las obras de la autovía del Cantábrico eran muy esporádicos, cada varios años y únicamente cuando llovía con mucha intensidad. Desde que las obras de la Transcantábrica derivaron todos los desagües de la N-634 y de la A-8 hacia el arroyo hay inundaciones “varias veces al año, casi cada vez que llueve”, según denuncian los vecinos.
Armas aseguró que hace ya dos años técnicos de la Confederación visitaron la zona y observaron que el problema tiene que ver con que el arroyo Mesa se sume bajo tierra por un agujero de muy difícil acceso y que seguramente esté tupido. Armas admitió que la solución es “complicada”, porque en la zona hay viviendas y fincas con cierres de piedra que quizá habría que derribar para acceder al sumidero. Pero cree que los afectados merecen ser atendidos, y que es la Confederación, titular del arroyo, la que está obligada a “tomar cartas en el asunto. Tiene que resolverlo”.
El Ayuntamiento, mientras tanto, tiene previsto impulsar este año el asfaltado de un camino de tierra desde la zona que ocupa un complejo de ocio en la naturaleza hasta el entorno de la capilla de San Felipe, lo que supondría un acceso alternativo para algunos de los afectados por las inundaciones. “Pero no para todos, porque en la zona de La Huera, hay quienes quedan incomunicados con los desbordamientos y no les dará servicio este nuevo acceso”, admitió Armas.
Las autoridades municipales no se han planteado hasta el momento, como reclaman algunos afectados, dirigirse al Ministerio de Fomento, titular de la Transcantábrica y de la N-634, par denunciar que se ejecutaron mal las canalizaciones durante la construcción de la primera.
En cuanto a otra inundación registrada estos días en el concejo llanisco, Armas indicó que la que afecta al entorno del río Carrocéu y la senda del mismo nombre “no es nueva, siempre ha ocurrido y por eso en el nuevo plan general se declara la zona como inundable y no se podrá construir”. Finalmente, la inundación ocurrida en una calle de Celoriu, aseguró que se debe a que el estanque de tormenta construido en la zona fue “mal ejecutado”, pero añadió que ya se ejecutan obras para subsanar este problema.
