El Oriente se llenó este verano. Los números confirman lo que hasta ahora era sólo una percepción o unos resultados previsibles a juzgar por el volumen de turismo que saltaba a la vista en las calles. Julio y agosto tuvieron niveles de ocupación que no se recuerdan en la comarca.

Así lo ponen de manifiesto las cifras de la asociación de empresarios de los Picos de Europa (Incatur), que se dieron a conocer ayer: la ocupación de los establecimientos de alojamiento llegó al 84 por ciento en julio y rozó el lleno total en agosto, con un 97 por ciento. La media de los dos meses se situó así en torno al 91 por ciento.

El pasado año, que también fue un buen verano en lo que a reservas se refiere, se quedó en una media para julio y agosto del 86 por ciento, esto es, un 5 por ciento menos que los resultados obtenidos este año en esos meses.

La ocupación del mes de julio del pasado año llegó al 78 por ciento frente al 84 por ciento de 2021, reforzándose la diferencia en el mes de agosto, al pasar del 94 por ciento en 2020 al 97 por ciento este verano. “Ha sido un verano mejor que el que se preveía, se han superado con creces las previsiones y el sector ha trabajado muy bien”, comentó Saúl Asprón, presidente del colectivo de empresarios con sede en Cangas de Onís.

Lo que inicialmente más reservaron los visitantes que eligeron este área de Asturias para su veraneo fueron los apartamentos o casas rurales de contratación íntegra. Desde el principio de la temporada estival registraban un mayor porcentaje de reserva, pero finalmente se llenó toda la variedad de oferta de alojamientos.

Hay que tener en cuenta que la presencia de turismo en la zona ha sido aún mayor de la que arrojan los datos, puesto que cada día ha habido centenares de caravanas distribuidas por todos los concejos del oriente que han pernoctado sin registro en lugares públicos, razón por la que no existen datos. Una presencia que ha llevado a varios ayuntamientos del oriente a tomar medidas ante la imposibilidad de controlar que este tipo de vehículos llenasen aparcamientos no habilitados para ellos, o tratasen muchos de acampar en vez de pernoctar, algo que está prohibido.

Los empresarios de Incatur consideran que los datos obtenidos de ocupación son “muy buenos” y, aunque evidencian que los meses de cierre obligado por la pandemia no se pueden recuperar en dos de verano, los resultados han supuesto un espaldarazo al sector.

“Todos los meses perdidos no se pueden recuperar en agosto, pero ha sido un buen balón de oxígeno con mucha afluencia en un momento del año en el que hay buenos precios”, comentó Asprón.

El presidente del colectivo de empresarios quiso destacar el esfuerzo realizado por el sector hostelero y hotelero en el cumplimento de los protocolos que se exigían desde el Principado por la pandemia. “El sector se ha volcado desde el principio para adaptarse a los protocolos e intentar ayudar”, indicó.