David ORIHUELA

La minicocina ha sido sin duda la protagonista de la semana en la ciudad. El III Campeonato de pinchos y tapas de Oviedo ha superado las expectativas de la organización no sólo por la cantidad de participantes, a un lado y otro de la barra, sino también por la calidad. En los cinco días que ha durado el concurso, se han vendido decenas de miles de pinchos, a una media de cien al día, en los 77 establecimientos participantes.

Durante toda la semana tres jurados degustaron cada una de las 99 propuestas gastronómicas de los cocineros ovetenses. Ayer le llegó el turno al jurado que elegirá los cuatro pinchos ganadores. El primer premio se llevará el «Vetusta de oro», el segundo el de plata, y el tercero el de bronce. Además, hay un premio especial para el mejor pincho asturiano.

El jurado, compuesto por Luis Alberto M. Abascal, Eduardo Méndez Riestra, Rodrigo Roza, Javier González y Carlos Delgado, recorrió ayer los doce establecimientos finalistas y eligió los pinchos ganadores. El resultado se conocerá pasado mañana, a las siete de la tarde, en un acto que tendrá lugar en el recién inaugurado balneario de Las Caldas.

El concurso de pinchos, organizado por el Ayuntamiento de Oviedo, la Asociación de Hostelería y la Cámara de Comercio, cuenta con el patrocinio de LA NUEVA ESPAÑA. Esta tercera edición ha superado a las anteriores y ha atraído a numerosos comensales debido a la coincidencia con la Feria de la Ascensión y el puente del primero de mayo.

Los doce elegidos para la final fueron los pinchos de Old San Juan, bar Aniceto, vinatería La Tabernilla, casa de comidas Chema, bodega Siete Plazas, La Bellota Asturiana III, sidrería restaurante Los Lagos, República del Vino, El Ladrón de La Vega, Entrevinos y Thyrsus Vinoteca.