Ch. N.

La expropiación de «Villa Magdalena», iniciada hace ahora 15 años, en 1995, habrá finalizado dentro de cinco y habrá costado 43,4 millones de euros. En 2015 el Ayuntamiento habrá abonado los 27,6 millones restantes (ya se han abonado 15,8 millones) con el subsuelo del tramo de la calle Uría comprendido entre Toreno y Santa Cruz. Debajo habrá un aparcamiento de tres plantas y, en la superficie, el corazón de Oviedo se habrá convertido en una gran zona peatonal. Ése es, a grandes rasgos, el panorama que plantea el histórico acuerdo al que llegaron ayer, tras más de dos meses de negociaciones, técnicos municipales y representantes de la empresa Comamsa del empresario Miguel Ángel Menéndez del Fueyo.

El documento, que no será válido hasta que lo ratifique el Pleno del Ayuntamiento y lo rubriquen el Alcalde y la empresa, se basa en la solución avanzada por Gabino de Lorenzo a mediados del mes de febrero, consistente en que la histórica deuda por la expropiación de la finca y el palacete de la avenida de Galicia se liquide sin desembolso económico.

La empresa ha fijado finalmente la retasación de «Villa Magdalena» en 29,5 millones de euros, una cifra sensiblemente inferior a la retasación de 62,9 millones de euros que Comamsa planteaba desde 2007, aunque triplique la tasación inicial de 1.390 millones de pesetas ( 8,3 millones de euros) que Del Fueyo planteó en 1997, cuando tras dos años de negociaciones el Ayuntamiento hizo efectiva la expropiación de la finca.

De esa retasación final que las dos partes ahora aceptan, el Ayuntamiento ya ha pagado 11,7 millones de euros, al margen de 4,1 millones en intereses. Quedan 17,75 millones de euros a los que todavía habrá que añadir más de tres millones de euros en concepto de pago de intereses por el resto y algo más de cinco millones de euros que cubrirán los gastos financieros derivados de la inversión que la empresa tendrá que realizar hasta que el parking entre en funcionamiento, dentro de cinco años. La suma deja la deuda final de «Villa Magdalena» en un poco más de 26 millones de euros.

El pago de esta cantidad se realizará, según un borrador del acuerdo, «con la enajenación del subsuelo necesario para hacer un aparcamiento subterráneo de tres plantas que ocupará la superficie del actual aparcamiento de la plaza de la Escandalera, el tramo de la calle Uría comprendido entre Marqués de Santa Cruz y Toreno, incluyendo el paseo de los Álamos, y un tramo de dos plantas en la calle Toreno».

En la actualidad el aparcamiento de la Escandalera es propiedad de Aparcamientos de Asturias, S.A., del grupo Masaveu, motivo que ha obligado a introducir una cláusula en el acuerdo alcanzado entre el Ayuntamiento y Del Fueyo que precisa que será Comamsa quien se hará cargo de la adquisición, demolición y reconstrucción de este parking.

La cesión de todo este subsuelo no será, no obstante, suficiente para el pago de todo lo que se debe por «Villa Magdalena», la tasación del espacio que Comamsa dedicará a aparcamiento suma 18,6 millones de euros. El resto, hasta completar la cifra de los 26 millones y pico de euros, se completará con aprovechamientos urbanísticos, una de las opciones que siempre se estudió para solucionar la expropiación de «Villa Magdalena».

El principio de acuerdo no lo especifica todavía, pero el borrador habla de «futuros convenios urbanísticos con terrenos de otras zonas de Oviedo para edificar hasta un máximo de 22.975 metros cuadrados».

La otra cara del acuerdo, y que en realidad no forma parte del mismo, es lo que hará el Ayuntamiento con la oportunidad que supone levantar el corazón de la ciudad para construir un gran aparcamiento subterráneo.

La respuesta, según adelantó ayer el alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, es la de crear «una gran zona peatonal» que «supondrá un auténtico hito histórico para Oviedo y para la calidad de vida de los Ovetenses».

La peatonalización que el Ayuntamiento propone, una vez que el parking esté terminado, no se limita exclusivamente a la superficie correspondiente al área dedicada a aparcamiento subterráneo. Irá más allá. «Saldar la deuda con subsuelo», anunciaba ayer Gabino de Lorenzo, «nos va proporcionar un magnífico aparcamiento y la posibilidad de peatonalizar la calle Uría, la plaza de la Escandalera, la plaza del teatro Campoamor y la del Carbayón». «Es una extraordinaria oportunidad», añade De Lorenzo, «que nos meterá en ese club selecto de grandes ciudades».

El Alcalde se muestra «muy optimista» ante todo este proyecto, aunque todavía no se conocen más detalles de los límites reales de este posible plan de peatonalizaciones ni qué sucederá con el tráfico que ahora mismo recorre toda esa zona, una arteria fundamental en el viario urbano. En cualquier caso, la promesa de Gabino de Lorenzo es que Oviedo «remata, así, su modelo de ciudad peatonal».