Pancartas, pitos, gritos, carreras, niños y adultos llorando, conatos de agresión... Estas son algunas de las imágenes que pudieron verse hoy en el casco antiguo ovetense tras la celebración del Pleno en el Ayuntamiento en una escena que -más que nada por los decibelios y la tensión- bien podría asemejarse a una "engarradiella" entre los hinchas de dos equipos rivales. Y es que los miembros del tripartito sufrieron un escrache al término de la sesión por parte de los trabajadores y directivos de La Auxiliar de Recaudación. El motivo fue el voto en bloque de la izquierda (Somos, PSOE e IU) contra dos mociones presentadas por la oposición (PP y Ciudadanos) para que el Pleno instara al equipo de gobierno a prorrogar el contrato con la empresa privada que se encarga de la recaudación de los impuestos municipales.

El contrato con La Auxiliar expira a finales de año y el tripartito aún no se ha manifestado sobre si prorrogará el contrato o traspasará al Principado el cobro de los tributos. El incierto futuro de los 42 trabajadores de Recaudación ha sido motivo de fricción entre los socios de gobierno. Por un lado, IU, que quiere hacer todo lo posible para que la plantilla en bloque no acabe engrosando las listas del paro. Por otro, Somos y el PSOE, que quieren que La Auxiliar se convierta en el primer ejemplo de la política de remunicipalizaciones por la que apuesta el tripartio, IU incluido.