El herido más grave de los altercados de los últimos fines de semana en el Antiguo ha recibido el alta hospitalaria y se recupera en su domicilio, poco a poco, porque la herida "aún sangra". Se trata del portero de un bar de copas en la calle San Antonio, que recibió una puñalada en el costado izquierdo, muy cerca del corazón, tras llamar la atención a dos clientes que "se estaban metiendo unas rayas" en los baños del local. Ha tenido mucha suerte, según explican su jefe (el responsable del local) y su abogada, Judith Gómez, del despacho Vox Legis. "La puñalada fue a traición, iba directa al corazón y está vivo de milagro", aseguran.
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Del trabajador del local, sus conocidos no tienen más que buenas palabras. Se trata de un joven de 25 años, de origen marroquí, "responsable y trabajador que "está luchando por ganarse la vida". Al parecer, el chico llevaba poco tiempo trabajando en el local, pero desde el principio demostró una gran entrega al trabajo. Por eso, relata su jefe -que no se encontraba en el bar el día del suceso- no dudó en llamar la atención a dos clientes que estaban consumiendo cocaína en uno de los baños del establecimiento, en compañía de una tercera persona, una mujer. Se trata, según ha trascendido, de dos hermanos de etnia gitana vecinos de Oviedo (el presunto autor de la puñalada ha sido detenido y puesto a disposición de la autoridad judicial) y de la pareja de uno de ellos.
No eran clientes habituales, de todos los fines de semana, pero sí solían pasarse por la calle San Antonio con cierta frecuencia, cada dos meses. "Les llamó la atención y estuvieron forcejeando. Parecía que el asunto estaba resuelto, pero cuando estaba todo parado, uno de ellos cogió la navaja y lo apuñaló. Lo hizo para matarlo, la agresión fue en la parte izquierda del pecho, iba directa al corazón, pero por suerte no midió bien", explican desde el círculo del portero agredido. Una versión que han ratificado los investigadores de la Policía Nacional. "Que salgas por la noche con una navaja encima ya dice mucho de la persona que la lleva... En este caso podría considerarse un intento de homicidio, fue una puñalada muy cerca del corazón", señalan las mismas fuentes policiales consultadas.
El responsable del local está satisfecho con la intervención policial y también de la eficacia de los servicios sanitarios. Afirma que todo sucedió muy rápido, tanto la agresión, como la llegada de la ambulancia y los agentes de los cuerpos policiales, que lograron detener al agresor del trabajador del local minutos después del suceso.
Este apuñalamiento -que dejó al herido más grave de los cuatro altercados con arma blanca de los tres últimos fines de semana en el Antiguo- tuvo lugar alrededor de las cuatro y media de la mañana del pasado 25 de marzo, en pleno puente de Semana Santa. Después de ser atacado, al portero de la calle San Antonio aún le quedaron fuerzas para salir en busca de ayuda. En el camino, casualmente, se encontró con una patrulla de la Policía Nacional que estaba vigilando la zona. Los agentes enseguida identificaron al agresor, de 32 años, y procedieron a su detención. El Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) se encargó de trasladar al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) al herido, que acaba de recibir el alta hospitalaria, aunque, según comentan sus allegados "no se ha recuperado del susto".