"No voy a dar mi nombre ni salir en la fotografía porque habría represalias, pero aquí todo el mundo sabe que la quema de coches está relacionada con los ajustes de cuentas por negocios sucios". Pues más claro el agua. Este vecino del barrio de La Carisa no está dispuesto a desvelar su identidad porque tiene miedo a "salir escaldado", pero asegura que el fuego que arrasó un vehículo durante la noche del pasado lunes -concretamente en la calle Tigre Juan- fue provocado y tiene que ver "con un asunto de deudas por droga". No es el único que defiende ese argumento, la mayoría de los vecinos consultados ayer por este diario coinciden a la hora de sostener esa teoría, aunque la mayoría prefieren no hablar sobre ese asunto con nombres y apellidos. El último coche quemado en La Carisa, según los vecinos, pertenece a una pareja a la que ya le incendiaron otro vehículo hace siete meses.
El suceso de la noche del lunes no es un hecho aislado. El pasado 28 de marzo, también en la calle Tigre Juan, un Audi TT, un Peugeot 307 y una furgoneta Renault Express resultaron completamente calcinados en plena calle. Meses antes, en diciembre de 2015, cinco coches más aparecieron quemados muy cerca de allí, en La Corredoria. "Sonaron dos explosiones muy fuertes, como si fuesen dos cartuchos de dinamita, y entonces me asomé a la ventana para ver que ocurría. Cuando salí pude ver cómo el coche estaba totalmente en llamas. Fue sobre la una de la madrugada", explica Avelino Feito, que reside justo enfrente del lugar en el que se produjo el incendio. "Cuando ocurren cosas como estas los vecinos nos sentimos inseguros. En el barrio debería de haber mucha más presencia policial e incluso cámaras de vigilancia para que no pasen estas cosas", añade Feito.
A eso sí se atreven los vecinos, a pedir abiertamente que se incrementen las medidas de seguridad en el barrio. "No es la primera vez que ocurre y no podemos estar expuestos a algo así porque un día puede ocurrir una desgracia", denuncia Juan Antonio García, otro vecino de la zona. Según sostiene, "un coche incendiado puede quemar a otros que estén a su lado y armarse una de las buenas".
En esa misma línea se mantiene Víctor Manuel Feito. "Estamos hartos de la falta de seguridad que hay en este barrio. La policía pasa muy poco por aquí cuando lo que habría que hacer es prestarle especial atención a una zona como esta", asegura. En su opinión, "no sólo ha ocurrido lo de los incendios, también hay otros actos de vandalismo, como por ejemplo los que ocurren en el campo de fútbol 7 que está aquí al lado -justo detrás del lugar en el que se quemó el último coche-, donde ya se han roto los banquillos, las redes y todo lo que uno se pueda imaginar".
Víctor García lleva "unos cuantos años" viviendo en La Carisa y también es de los que piensa que es necesario aumentar el nivel de vigilancia en el barrio. "A veces me toca trabajar por las noches y se ven unas cosas que asustan. La Carisa es un barrio al que la policía acude en muy pocas ocasiones y creo que los vecinos tendríamos que tener más seguridad", asegura. Según sostiene García, "Sólo con la presencia de las fuerzas del orden, con que se enseñen, bajarían los actos vandálicos".
