Gran cantidad de productos de presencia habitual en todos los hogares representan una amenaza para los perros que viven en ellos. A pesar de que los dueños de las mascotas se esmeran en cuidarlas y protegerlas de todo mal, muchas veces este propósito se convierte en algo imposible.

En las casas se utilizan artículos y sustancias de uso cotidiano que pueden ser tóxicos y altamente peligrosos para los animales. A eso se le suma que los perros son animales muy curiosos y que usan su boca para investigar todo lo que se les ponga por delante.

Para prevenir accidentes merece la pena hacer una lista de los productos presentes en cualquier hogar que pueden resultar extremadamente peligrosos para nuestros amigos peludos.

Productos de limpieza. Los líquidos para la limpieza de la casa son muy tóxicos para los perros. Si un animal ingiere alguno de estos elementos, su aparato digestivo se verá altamente dañado. Además, la irritación de las vías respiratorias puede ser posible si el producto es inhalado. Hay que tener mucho cuidado y guardar estos elementos fuera del alcance de los perros.

Pinturas y disolventes. El aguarrás, el barniz y las pinturas son peligrosos para los canes tanto si los ingieren como si los respiran. Estas sustancias pueden causarles irritación severa o pueden producirles quemaduras si se las tragan o si entran en contacto con la piel de su mascota.

Rodenticidas e insecticidas. Los venenos para ratas y cucarachas son también letales para los perros. Es mejor evitarlos. Según el tipo de raticida y la cantidad ingerida, el perro puede padecer convulsiones, hemorragias y problemas en los riñones y en otros órganos.