La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Oviedo dio ayer luz verde a la licitación de la revisión del Plan General de Ordenación (PGO), que pierde precisamente su condición "Urbana" al intentar, en este nuevo modelo impulsado por el tripartito y defendido por el concejal Ignacio Fernández del Páramo, atender todo el concejo, también lo rural, con la idea de "construir un nuevo sustrato para la ciudad, un modelo sostenible".

El concejal de Urbanismo adelantó ayer algunas cuestiones prácticas del nuevo PGO, que se exigirán a la empresa que logre hacerse con el contrato. Prácticas y teóricas. En el apartado de las novedades Fernández del Páramo llamó la atención sobre la necesidad de que el nuevo Plan General aborde ciertos aspectos sociales como el problema del "urbanismo de género". "La ciudad es un ser vivo que se ha venido desarrollando desde hace años, con una parte del patriarcado diseñando un modelo de ciudad determinada, y la cuestión es cómo revertir ese problema".

Para lograrlo, el Plan General tendrá que abordar cuestiones como los espacios dedicados al cuidado (más zonas verdes, más bancos), sendas escolares seguras y aportar otra visión del espacio público pensada desde el punto de vista de género.

Otras cuestiones sociales, citó el concejal, podrían ser las cubiertas verdes, el derecho al sol (referido a la orientación de los edificios) o la exigencia de nuevos espacios en la zona baja de los edificios destinados para aparcar bicicletas, carritos de niños, compra... Cuestiones que, explicó Fernández del Páramo, ya suceden en ciudades como Vitoria, que citó como ejemplo del nuevo modelo urbanístico.

En las cuestiones teóricas, la licitación sale en 1,1 millones, no se primará la oferta económica e incluirá también la revisión del plan de canteras, la revisión del plan de telecomunicaciones y la revisión del plan especial de Olivares.