"En el Quijote está escrito el genoma de la literatura, y además en español". Jesús G. Maestro (Gijón, 1967), profesor de Teoría y Crítica de la Literatura en la Universidad de Vigo y artífice del Materialismo Filosófico como teoría de la Literatura, a partir del Materialismo Filosófico de Gustavo Bueno, aseguró ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA que "la literatura es una trampa para quien no sepa interpretarla y Miguel de Cervantes fue el más tramposo de todos".

Maestro, que presentó su obra titulada "Crítica de la razón literaria: El Materialismo Filosófico como Teoría, Crítica y Dialéctica de la Literatura", estructurada en tres volúmenes, ha querido hacer un tratado de investigación científica, crítica y dialéctica sobre los fundamentos, desarrollos y posibilidades del conocimiento racionalista de la literatura.

Los tres tomos, que Gustavo Bueno Sánchez, profesor de Filosofía de la Universidad de Oviedo y presidente de la Fundación Gustavo Bueno, transportó con mimo y buen humor en un coqueto carrito de la compra hasta la mesa del Club, son fruto del firme deseo de Maestro de situar a Bueno como base y referente para elaborar una inexistente teoría literaria propia del hispanismo. "Desde 1950, el hispanismo no tenía una teoría literaria propia; todo era de importación, con un complejo absoluto frente a franceses y anglosajones. Muchas de las tesis actuales tejen y retejen a autores de hace sesenta años".

Jesús G. Maestro comenzó a interesarse por el materialismo filosófico hace doce años, pero con 17 años ya organizó en el gijonés café Dindurra una conferencia impartida por Gustavo Bueno, a la que también acudió su hijo, "aunque sin saber entonces que el organizador era Jesús", indicó ayer. Bueno Sánchez, volcado en la divulgación de la obra de su padre y maestro, se mostró satisfecho con los resultados de los X Encuentros de Filosofía que se desarrollan estos días en la Fundación, con un buen número de asistentes, y representantes de la Facultad de Filosofía de la ciudad mexicana de León (Guanajuato), auspiciada por la Fundación y el Instituto Oviedo, cuya cátedra de Filosofía Cervantina dirige Jesús G. Maestro. "Estamos como estábamos entregados a la posmodernidad que no casa con el pensamiento de Bueno; yo fui educado en eso de que lo que se escribía en español no tenía valor". Maestro fue más allá y dijo incluso que "hoy en la Universidad trabaja el que no sirve para otra cosa". También se afanó en derribar el mito de que todo lo de fuera es magnífico. "Cuando estuve en universidades europeas y estadounidenses comprobé que la situación era bastante espantosa".

En 2004 decidió dejar de hacer ese tipo de viajes profesionales al extranjero. "Ahora sólo voy como turista, que es mucho mejor". A su juicio, la única posibilidad de revertir el panorama de la teoría de las letras en España es volver los ojos hacia Bueno, que "hizo posible la construcción de una teoría de la literatura desde el hispanismo, es una pena que él no haya podido ver esta obra acabada".

El profesor, que no comulga con el funcionamiento de la Universidad española, aunque dice llevarse muy bien con todos los compañeros de la suya, publicó su primer artículo en LA NUEVA ESPAÑA en 1984, con 16 años. También entrevistó al pensador riojano, afincado en Oviedo, en varias ocasiones. "Por eso es tan especial para mí estar en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA con personas tan vinculadas a Bueno, es una sensación muy grata".

Maestro se doctoró en la Universidad de Oviedo "en un contexto en el que no podía hablarse de Bueno, que era considerado un 'rojo'. Pero una vez que obtuve la plaza fija organicé mi vida académica sin practicar la subordinación a nadie".

En definitiva, en la obra de Maestro subyace una crítica feroz. "Para escribir los tres tomos sólo necesité tener a mano la obra de Gustavo Bueno y un ordenador; siempre he ido al margen de las subvenciones de la cultura y la política, y de espaldas a la Universidad, a la que me he enfrentado por esa endogamia que la corrompe".

Jesús G. Maestro ha sido traductor, autor y editor de múltiples libros y publicaciones científicas sobre Miguel de Cervantes. Por reivindicar, reivindica hasta una definición de literatura. Aporta valiosas ideas. "La literatura es una construcción humana y racional, que se abre camino hacia la libertad a través de la lucha y el enfrentamiento dialéctico".