Cuando nacieron los componentes de "Bisonte", el siglo XX estaba llegando a su fin. Su música, sin embargo, dispara al otro lado. Son veinteañeros, llegaron de Avilés y salieron del último concurso de rock de San Mateo, el "Alejandro Espina", con el primer premio, que ayer recibieron de manos del concejal de Cultura, Roberto Sánchez Ramos, y también del padre del músico que da nombre al certamen, Alejandro Espina. Pero "Bisonte", a pesar de rondar los veinte suenan a los últimos años de los sesenta. Guitarras cargadas de riff, ritmo de boogie y contundencia. No lo ocultan. Van de otra cosa.

"Puede que llame la atención que seamos jóvenes y hagamos este tipo de música", explican en un alto del ensayo, quitándose la palabra en el manos libres Carlos Payer (batería), Mario Aguirre (guitarra), Nacho Bocos (guitarra solista) y Carmen Gilsanz (bajo). Falta su cantante, César González, pero en el planteamiento musical no parece que haya fisuras: "Nosotros no tenemos una fórmula, no somos un grupo de música pop y no estamos en el circuito indie, que básicamente es ya casi una radiofórmula en la que todos los grupos que salen de España vienen cortados por el mismo patrón. Nosotros nos aislamos un poco de estas tendencias y tratamos de recuperar el pasado. Nunca hay que olvidarse de George Harrison".

Ni de Johnny Winter, ni de Chuck Berry, por citar las versiones que empezaron tocando hace dos años. Luego surgieron los primeros temas propios, en castellano, con gusto a los primeros "MClan", y una demo grabada en los estudios 15/40.

Hasta ahora, su carrera ha sido tocar en todos los garitos y escenarios que han podido de Avilés. Ahora, el objetivo es darse a conocer un poco más, colarse en todos los sitios y llevar su música hasta donde les dejen. El nuevo, ya en marcha en los estudios de Miguel Herrero, lo financiará este primer premio de Oviedo. Por otra parte, son realistas. "vivir de la música es complicado y para hacer esto a gusto, mejor por ocio".