Agentes de la Policía Nacional arrestaron a un vecino del barrio de Otero que, en los últimos días, llevaba una intensa actividad criminal. El detenido, tras ser puesto a disposición judicial, ingresó recientemente en la prisión de Asturias.

Las andanzas de M. A. A. F. dieron comienzo a principios de julio, cuando, mientras robaba el interior de una furgoneta aparcada en la calle, fue pillado in fraganti por los dueños del vehículo. Menos de una semana después, el detenido sustrajo un móvil en las piscinas de San Lázaro, con el que se hizo diversas fotos que subió a las redes sociales de la víctima. Justo una semana después, tras recibir una denuncia por dos robos con fuerza en autobuses de la empresa TUA, que estaban aparcados en las inmediaciones del HUCA, las investigaciones de los agentes del Grupo de Delincuencia Urbana volvieron a situar al detenido en las inmediaciones del suceso, al encontrarse ingresada su mujer en el mismo hospital

El 24 de julio, la Policía recibe una nueva denuncia, esta vez a causa de la sustracción de una máquina de lacar del interior de una furgoneta, situada donde el delincuente aparcaba su propio coche. Este hecho y el modus operandi le vuelven a situar como principal sospechoso, lo que se confirmó al encontrar en su casa el elemento sustraído.

El 27 de julio se recibe una nueva denuncia, esta vez por un robo con daños valorados en 250 euros en otro autobús de la empresa TUA, delito por el que se le vuelve a identificar como autor de los hechos.