La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

ANA TABOADA | Vicealcaldesa de Oviedo

"Poner palos en la rueda al Bulevar sería traicionar a Oviedo"

"Los directores generales habrían mejorado la gestión y la coordinación, pero la negativa del Alcalde lo impidió, fue el mayor escollo, pese a que sus compañeros tenían disposición"

Ana Taboada, ayer, en Oviedo. IRMA COLLÍN

Ana Taboada prepara la recta final del mandato del tripartito -"gobierno plural, preferimos llamarlo"- con el empeño de sacar adelante el mayor número de proyectos pendientes y la convicción, insiste, en que lograrán mantener el gobierno tras las elecciones de mayo.

- Se acaba el mandato y las plataformas hablan de boicot interno al proyecto estrella, el Bulevar de Santullano.

-El Bulevar es uno de los proyectos más importantes de transformación urbana de una capital de provincia que hay ahora mismo en España, casi 50 hectáreas, avalado por la UE con más de diez millones de euros, premiado por la FEMP por su proceso de participación ciudadana. Y es un espacio que desde 2007 es una calle, pero con el que el equipo anterior no fue capaz de ponerse de acuerdo con la sociedad civil en solucionarlo. Ahora tenemos un proyecto de gran envergadura, necesario para todos los barrios de su entorno y clave para resolver problemas tan importantes como la contaminación. Es un proyecto moderno, innovador y me sorprendería mucho que hubiera alguien dentro de este gobierno que estuviera poniendo palos en las ruedas. Algo así sería una traición a Oviedo y su ciudadanía.

- ¿Qué pasa, entonces, con el último informe, tan negativo?

-Es normal que haya debates, informes, como en todos los proyectos, como sucede para hacer un centro social o la cubierta de un colegio Ventanielles, más en este caso, dada la envergadura. El concejal de Urbanismo ya ha dicho que las cuestiones del informe son subsanables y que no habrá ningún problema. Tenemos que trabajar todos codo a codo para que salga adelante, es un prioridad. Como sucedió con las peatonalizaciones de Masip que De Lorenzo criticaba desde la oposición, cualquier transformación basada en la modernidad puede resultar polémica, pero el tiempo te acaba dando la razón.

- Y sin embargo, no han sido capaces de cumplir los plazos.

-Lo principal es el desmantelamiento de personal que sufrió esta casa. Trabajamos con los mimbres que tenemos. Luego hubo modificaciones como la rotonda, la ampliación del ámbito de intervención y tuvimos que pactarlo con el gobierno autonómico para que no hubiera problemas. Fueron mejoras del proyecto, porque todo proyecto merece ser mejorado, como te puede suceder si haces obras en tu casa. Lo importante es que hay un proyecto y que es la prioridad de este gobierno que salga adelante.

- Último trimestre de gobierno. ¿Proyectos para la recta final?

-Poner en marcha más servicios públicos, aparte de lo ya generado, desde la Universidad popular a los desayunos en los colegios que antes no existían. Ahora estamos con la implantación de la tarjeta ciudadana, la gratuidad del servicio de autobús para menores y las bonificaciones a los mayores o los cuidadores de barrio. Son políticas del cuidado de la gente, es a lo que nos dedicamos.

- ¿Esa es su herencia?

-Sí, este mandato ha sentado las bases para construir el Oviedo que queremos, un Oviedo mejor. Y para poner en marcha el plan del viejo hospital, el PGO, el del Bulevar, el de movilidad. Son proyectos a largo plazo que necesitan otros mandatos para consolidarse, y estoy segura de que este gobierno plural revalidará el mandato para llevarlos a cabo, para que Oviedo no apueste por el hormigón y los proyectos megalómanos, sino por la transformación urbana sostenible.

- No habla de grandes inauguraciones de cara a las elecciones, ¿entiendo que es algo que tampoco les interesa?

-El Oviedo de Gabino de Lorenzo era un modelo agonizante que dejó más de ochenta millones en pufos. Nosotros hemos sabido hacer más con menos, incluso pagando la deuda. Para ser un buen gestor ya no hace falta salir con corbata y casco a hacer inauguraciones y repartir pinchos. Ese mundo de señores de corbata ya ha cambiado en el imaginario de la sociedad. No sólo en Oviedo, en toda España.

- ¿Cómo explica que estén metidos en tantos juicios en tan poco tiempo? La última, una sentencia muy dura por autorizar fiestas en Gascona.

-Sobre Gascona no me voy a pronunciar porque no es mi área. Pero son casos que están muy centrados en un único despacho de abogados que coincide que es el del Partido Popular.

- Bueno, también es el que tumbó el parking de Uría.

-Sí, eso era Gerardo de la Iglesia. Están en su derecho, claro, pero ahora mismo se han especializado en demandar al Ayuntamiento, me temo. En todo caso, a lo largo de este año habrá otros juicios como el del que fue asesor de Gabino de Lorenzo y jefe de prensa municipal por intentar cambiar contratos para favorecer que determinadas personas trabajaran en el Ayuntamiento. También está analizándose en Fiscalía Villa Magdalena, una noticia muy buena, no por revanchismo nuestro, sino porque cualquier irregularidad referida a una biblioteca que nos costó 63 millones merece ser analizada.

- ¿Calendario electoral de Somos?

-Vamos más despacio que otros partidos. Mi mayor preocupación es tener una candidatura que se parezca a Oviedo, una candidatura de ciudad con distintos perfiles, como fue la de 2015. Pero ahora toca esforzarse hasta el último día para que salga todo lo que tenemos en cartera.

- ¿Qué efecto cree que podrá tener en Oviedo el auge de opciones políticas como Vox?

-En Oviedo, en los espacios donde he trabajado en mi actividad profesional y en los que he conocido en estos años no he visto a nadie que pudiera parecerse a Vox o a lo que Vox piensa. Creo que Oviedo no tiene mucho de eso.

- ¿Por qué no han cuajado iniciativas de su área como los presupuestos participativos?

-A participar se aprende participando, y llegamos a un Ayuntamiento donde esta área ni existía. De la nada creamos procesos como el de los nombre de las calles de Olivares, exitoso a pesar de sus avatares. Los presupuestos participativos son un proceso de aprendizaje lento y con ello debemos seguir. Hemos contado con todas las dificultades, pero aún así hemos logrado sacarlos durante dos años y se están haciendo proyectos: la formación de voluntariado en el albergue de animales, la propia tarjeta ciudadana, el cierre del colegio Ángel González que ya tiene proyecto... Y luego hemos puesto en marcha los programas de barrio, que permiten que Oviedo se vuelva a mirar a la cara, que se reconozca y que piense en trabajar en comunidad.

- Han tenido muchos problemas con la tramitación. ¿Eran la solución, por personal y control de las estructuras, los directores generales?

-Hubiera ayudado. En un Ayuntamiento con dificultades en personal y técnicos con sobrecarga de trabajo, todo lo que sea añadir recursos humanos ayuda. Necesitábamos más manos para tirar del barco. Y hubiera ayudado a tener más coordinación y mejorar la gestión. No es una cuestión de poner a nadie a dedo. Hay funcionarios capaces en otras administraciones y estaríamos dispuestos a que nuestros socios decidieran cómo llevar a cabo estos procesos.

- ¿Por qué no lo han hecho? ¿Por la negativa del Alcalde?

-Debería preguntárselo a él, pero sí, él ha sido el mayor escollo, e incluso sus compañeros de partido tuvieron disposición a estos nombramientos.

- ¿Y la Vega? ¿Espera novedades para antes del final del mandato?

-Primero se dijo agosto, luego noviembre y estamos ya en enero. Hay que desbloquear esta situación ya. Espero la reunión con Defensa en Oviedo cuanto antes y que venga la ministra, que venga a mi barrio y vea lo que Oviedo se juega con la Vega y que sepa que es una prioridad para un gobierno de su mismo signo político. Estamos en la capital de la región. La Noche Blanca, la Fábrica Scorsese o las últimas propuestas de un polo biosanitario confirman que es un espacio de dinamización económica muy necesario para toda Asturias. Ya no hay excusas, y no es una cuestión de si el protocolo se firma o no. Son también los usos temporales. Sucede lo mismo que en el Cristo. Es muy necesario que esos espacios permanezcan vivos y se reclamen como propios. Hay que resolverlo cuanto antes.

Compartir el artículo

stats