Perpetraron un robo para sacarse un puñado de euros y terminaron arrestados tras intentar agredir a dos agentes de Policía. Ahora se enfrentan a penas de seis años y tres meses y de dos años y tres meses de cárcel, respectivamente, acusados, entre otras cosas, de echar de la calzada a un vehículo policial cuando trataba de darles el alto en las inmediaciones de Cerdeño. Al volante del vehículo, sin seguro, iba uno de los acusados, que no tenía permiso de conducir y que dio positivo en alcohol. El juicio de los hechos, sucedidos el día 14 del pasado octubre, se celebra hoy, a las nueve y media de la mañana en el juzgado de lo penal número 3 de Oviedo.

Todo comenzó en torno a las dos de la tarde, cuando el vigilante de seguridad del polígono industrial del Espíritu Santo vio cómo una pareja se bajaba de un Citröen Xsara para sustraer unos 300 litros de combustible de un camión estacionado en la mancha industrial. El trabajador llamó a la Policía y rápidamente se personaron en el lugar varias dotaciones.

A pesar de las advertencias luminosas y sonoras de los coches policiales, los supuestos ladrones decidieron emprender la huida. Arrancaron su turismo y arrancaron en dirección Oviedo a través de la carretera nacional 634. Cuando llegaron a la glorieta de Cerdeño chocaron contra el guardarraíl y pasaron por encima de una isleta. Otro coche de policía aprovechó para ponerse a su altura. Lejos de detenerse, dieron un volantazo a la izquierda y echaron a los agentes fuera de la calzada.

En ese momento detuvieron la marcha y al acercarse la policía hacia ellos, la mujer, en primer lugar, y el varón, trataron de agredirles hasta que fueron reducidos. En el coche se les encontró el combustible robado y el material empleado para el robo como un cuchillo de sierra de 19 centímetros y otro de cocina de ocho.

Se pudo comprobar que el hombre circulaba sin carné ni seguro. Además, en dos controles de alcoholemia posteriores dio como resultado 0,93 y 0,900 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, o lo que es lo mismo, casi quintuplicó los niveles legales permitidos para circular. Del mismo modo, los policías descubrieron que cuenta con numerosos antecedentes penales, entre ellos un quebrantamiento de una condena anterior, lo que podría dar más motivos al juez para decretar su ingreso en prisión por reincidente.