Efectivos de Bomberos extinguieron en la mañana de ayer un incendio en un sótano de un edificio de la calle Dionisio Ridruejo, junto a Muñoz Degraín. La presencia de humo en las escaleras alertó a los vecinos que decidieron salir voluntariamente y de manera ordenada a la espera de conocer la gravedad de las llamas.

El fuego fue sofocado rápidamente y no hubo que lamentar daños personales. "Vamos a tener que poner cámaras", clamó una vecina, que sospechaba que el alarmante suceso pudiese ser obra de un pirómano. Pese a todo, en el portal se agolparon decenas de residentes, tanto para seguir la evolución de las labores de extinción, como para evitar un posible susto en caso de que las llamas se extendiesen a los pisos superiores.

Los efectivos municipales calificaron la incidencia de "falsa alarma", puesto que las dimensiones del fuego fueron escasas y apenas hubo que realizar labores de extinción. De todos modos, el suceso generó un gran malestar en el vecindario, temeroso de la existencia de algún pirómano por la zona. "Hoy no pasó nada, pero eso no impide que otro día estemos en casa tranquilamente y se produzca una desgracia", declaró un padre de familia muy enfadado por un suceso que pilló a toda la comunidad por sorpresa.