Descubrir un mensaje de un artesano cristiano japonés de hace 400 años y ejercer de comisaria en una exposición organizada en 2013 en el Museo Nacional de Artes Decorativas de Madrid, inaugurada por el Emperador Naruhito. Esos fueron "los dos grandes momentos" en la vida de la historiadora Yayoi Kawamura, a los que ayer sumó la recepción del premio "Paul Harris Fellow" del Rotary Club de Oviedo en reconocimiento a su labor investigadora durante los últimos 30 años y su contribución a estrechar lazos entre su país de origen y España.

La profesora titular de la Universidad de Oviedo recibió "honrada, abrumada y perpleja" el máximo reconocimiento del colectivo con fines solidarios en una gala con 70 asistentes que aprovechó para impartir una conferencia sobre el resultado de su trabajo de tres décadas.

Kawamura defendió "la importancia y los valores de las ciencias humanidades" para conocer con rigor y veracidad los hechos del pasado y "entender los fenómenos actuales". La investigadora se centró en sus trabajos sobre la laca Namban, un tipo de arte japonés que empezó a llegar a través de los viajes a ultramar promovidos por España y Portugal. "El arte japonés fascinó a la nobleza europea de los siglos XVI y XVII", explicó en relación a la adquisición de arcas y otros objetos decorados con laca Namban importados desde el país nipón.

La investigadora, cuya figura fue glosada por el también historiador Vidal de la Madrid, destacó cómo posteriormente los miembros de la nobleza fueron donando los objetos a las instituciones religiosas. "He identificado 124 piezas de este tipo en España y la gran mayoría estaba en conventos, iglesias o catedrales", señaló al respecto de unos elementos utilizados en gran medida para "guardar reliquias o elementos de valor".

El ministro de la Embajada de Japón en Madrid, Toru Shimizu, arropó a la galardonada, valorando sus grandes logros profesionales y resaltando su papel en la contribución a acercar a Japón y España. "El intercambio cultural es muy importante", reivindicó el representante diplomático, quien aprovechó para invitar a los presentes a visitar el país del sol naciente. "Estaremos encantados de que ayuden a crecer la economía local", declaró levantando las carcajadas de los asistentes.

El acto oficial fue clausurado por el presidente del Rotary Club de Oviedo, Luis Ordóñez. El rotario subrayó la importante labor solidaria del colectivo e hizo una defensa y justificó la entrega del premio a la historiadora japonesa. "Defendemos el conocimiento y la cultura contra la ignorancia y en favor del entendimiento de los pueblos", sostuvo Ordóñez.