La soprano francesa Sandrine Piau entusiasmó ayer al público ovetense, con su prodigiosa interpretación de algunas de las heroínas de las óperas de Haendel. Acompañada por "Les Paladins", la formación francesa que dirige Jérôme Correas, la cantante puso en pie a los espectadores, en una sala de cámara del Auditorio repleta, y recibió bravos e interminables aplausos.

El concierto, incluido en el programa de la sexta Primavera Barroca ovetense, estuvo íntegramente dedicado a Haendel. A lo largo de las dos partes, la Piau interpretó a Parténope, a la Cleopatra de "Julio César", a Alcina y a su hermana Morgana.

Entre las arias se intercalaron la obertura y la marcha de "Ariondante", el "Concerto grosso. op.6, nº 4" y movimientos de "Rodrigo", todos de Heandel, y con ellos el conjunto instrumental dirigido por Correas, que tocó el clave durante el recital, obtuvo sonoros aplausos.

Tras cada una de sus intervenciones Sandrine Piau tuvo que salir por segunda vez a saludar, en respuesta a las aclamaciones, y antes de despedirse definitivamente regaló al público dos propinas. La primera dando voz a la bruja Armida, de la ópera "Rinaldo", y la segunda interpretando a Almirena, en la misma obra, con una de las arias más reconocibles de Heandel, "Lascia ch'io pianga".