Un total de 32 personas, el 80% de los 40 aspirantes iniciales, aprobaron el examen para la obtención del permiso municipal de taxista, celebrado ayer a las diez de la mañana en las instalaciones de la concejalía de Seguridad Ciudadana en el Rubín. La prueba escrita y con una duración de 50 minutos consistió en normativas y técnicas de conducción de unos vehículos para los que no es necesario superar una prueba práctica.
Los examinados conocieron sus notas pasada la una de la tarde, si bien ahora se abre un plazo de quince días para impugnar los resultados. En caso de haber reclamaciones, estas se estudiarán y se tomará una decisión definitiva sobre las mismas el día 18. Esa misma jornada, los aprobados podrán retirar ya sus carnés y obtener el derecho para poder ejecer de taxista en la ciudad.
Por otro lado, el Ayuntamiento de Oviedo acaba de repartir 30.000 euros en ayudas entre 16 conductores de taxis adaptados. El objetivo de estas subvenciones es colaborar con los gastos de mantenimientos de los vehículos adaptados para personas de movilidad reducida. El apoyo institucional busca favorecer la existencia de este tipo de vehículos preparados para mantener una oferta del servicio tan necesaria para algunos sectores de la población.
De los 16 beneficiarios, trece obtuvieron una ayuda de unos 2.000 euros, otros dos se quedaron ligeramente por debajo de esa cantidad y otro recibió poco más de 600 euros para colaborar con el mantenimiento de su vehículo.
El sector del taxi cuenta actualmente en Oviedo con unas 312 licencias de las que unas 300 pertenecen a las dos asociaciones mayoritarias de la patronal y trabajan desde este año con una misma emisora con el objetivo de ofrecer un servicio más rápido y eficaz para los usuarios.
