Por vez primera desde su puesta en marcha, en 1988, el Curso MIR de Oviedo no tendrá este año el programa presencial debido a la pandemia de covid-19. Las sesiones comenzarán a celebrarse en la fecha prevista -mediados de junio- en formato online, sin descartar que dentro de unas semanas o meses sea posible volver al modelo clásico, según ha comunicado la dirección de la academia a los aproximadamente 1.350 licenciados en Medicina que estaban inscritos a esta modalidad.
El curso tiene como escenario habitual una gran aula habilitada en el Seminario Metropolitano de Oviedo. Congrega a unos 1.200 médicos de fuera del Principado y a unos 150 asturianos, entre mediados de junio y finales de enero o principios de febrero del año siguiente. Además, otros 1.150 alumnos -hasta un total aproximado de 2.500- siguen las clases a través de internet o desde las sedes de la academia diseminadas por España.
Para Oviedo, el varapalo económico que acarrea esta situación es muy considerable. El programa de preparación para acceder a plazas de médico interno residente (MIR) deja en Asturias, y mayoritariamente en la capital, unos nueve millones de euros al año, a los que hay que añadir el montante de las matrículas que se abonan a la academia. Los responsables del curso han apurado la decisión hasta el último momento, confiando en que la evolución del proceso epidémico pudiera dar opción a alguna fórmula presencial más imaginativa. Sin embargo, los plazos no permitían demorar más el pronunciamiento. "Empezaremos online y mantendremos la estructura presencial por si en algún momento pudiera utilizarse, bajo la premisa de que la primera prioridad es la salud y seguridad de los alumnos", explicó ayer a este periódico la dirección de la academia. "En este momento no se puede saber cómo evolucionará la pandemia en el verano, el otoño y el invierno", precisó la misma fuente.
Plazas agotadas
El contratiempo ocasionado por la pandemia de coronavirus frena el auge que la academia MIR venía registrando en los últimos tiempos. Desde hace varios meses, no solo estaban agotadas las plazas del curso intensivo que comienza el mes que viene, sino también las de la próxima edición (de junio de 2021 a enero de 2022).
La demanda ha aumentado por varias razones, pero un factor sobresale por encima del resto: cada vez hay más candidatos en el examen y, como consecuencia, la exigencia de nota para obtener una plaza en la especialidad preferida también aumenta. Al incrementarse la competitividad, crece el interés por una preparación de calidad. Prueba de ello es que buena parte de los estudiantes de Medicina de toda España se matriculan en una academia ya al inicio del sexto curso de carrera, en el mes de septiembre.
Al concluir la carrera, en junio, pasan a dedicarse de forma exclusiva a preparar el examen: es entonces cuando comienza el curso intensivo y cuando llegan a Oviedo los aproximadamente 1.200 licenciados foráneos, en torno a los cuales se han configurado suculentos negocios de alojamiento, de servicios e incluso de ocio para las noches del sábado y el descanso de los domingos.
La pandemia de coronavirus también ha alterado la elección de plaza de los médicos que, a finales del pasado enero, realizaron el examen MIR y que a estas alturas deberían estar a punto de iniciar una especialidad en un hospital. Ayer, el "Boletín Oficial del Estado" (BOE) publicó las calificaciones definitivas y, según algunas fuentes, será a finales de junio cuando los aspirantes puedan elegir su destino.