La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Oviedo buscará el apoyo del Principado y del Estado para ser Patrimonio de la Humanidad

Los expertos descartan que la iniciativa de la ciudad interfiera en la de la cultura sidrera, que cumple un año pendiente del visto bueno en Madrid

La plaza de la Catedral, con varios visitantes. MIKI LÓPEZ

La tarea, de por sí compleja, va a requerir tiempo y cintura política. El Gobierno de Oviedo (PP y Cs) necesita para que la candidatura de la ciudad a Patrimonio de la Humanidad llegue a la Unesco el respaldo explícito del Principado y del ejecutivo central, ambos en manos del PSOE. El socialista ha sido el único partido de la Corporación municipal que no votó a favor de la propuesta en la sesión plenaria del pasado martes, decantándose por la abstención.

La normativa para la tramitación de estas iniciativas establece que deberá ser el Principado quien, a instancias del Ayuntamiento, remita al Consejo de Patrimonio Histórico Nacional, integrado por las comunidades autónomas y el Ministerio de Cultura, la petición para que el Estado promueva la candidatura de Oviedo ante la Unesco. De esta forma, el organismo se garantiza que la propuesta sume el respaldo de las tres administraciones. El Gobierno local que preside Alfredo Canteli ya ha hecho un llamamiento al consenso para superar las diferencias partidistas que pudieran surgir.

Expertos que conocen de primera mano cómo se gestó la candidatura de la cultura sidrera de la región calculan que Oviedo tardaría un mínimo de cinco años en ser declarada Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco. Y eso si la propuesta llega a buen puerto y la tramitación va rodada, sin parones ni incidencias destacables. A juicio de estos especialistas consultados por LA NUEVA ESPAÑA, para tener éxito el Ayuntamiento de la capital de Asturias debe justificar la petición con una sólida argumentación, empezando por delimitar con precisión de cirujano el espacio y los monumentos a proteger, algo que todavía no está decidido. A partir de ahí, tendrá que desplegar esa ingente labor de diplomacia política ante las administraciones autonómica y central para que respalden la candidatura y la lleven a la Unesco.

Lo que queda descartado ya de mano es que la candidatura que trata de impulsar Oviedo vaya a interferir en la de la cultura sidrera. Aunque ambas tienen como destinataria a la Unesco, las tramitaciones ante este ente de la Organización de Naciones Unidas (ONU) serían completamente independientes una de otra. La de la capital de Asturias se incluiría en la categoría de ciudad mientras que la de la sidra lo haría en la de patrimonio inmaterial. Además, el hecho de que la propuesta para la bebida asturiana ya esté adelantada y que la de la Oviedo se encuentre aún en pañales hace muy complicado que coincidan en el tiempo. Si todo va bien, la iniciativa sidrera culminará antes de que, llegado el caso, los técnicos de la Unesco analicen la ovetense.

Tras una gran movilización social, Asturias consiguió cerrar la candidatura de la cultura sidrera en julio de 2019. Transcurrido un año desde entonces, la iniciativa sigue pendiente de que el Consejo de Patrimonio Histórico Nacional la incluya en la denominada "lista indicativa" de España para Patrimonio de la Humanidad. Se trata de la candidatura oficial del Estado ante la Unesco, objetivo complicado y que obliga al Principado de Asturias a desplegar toda la influencia política de que disponga, ya que solo se inscribe un aspirante cada dos años.

Compartir el artículo

stats