El ocio nocturno de Oviedo tiene la soga al cuello y corre el peligro de desaparecer si no les permiten reabrir o les ofrecen ayudas públicas para cubrir los gastos fijos inasumibles por su inactividad forzosa. Es el mensaje con el que la Asociación de Bares de Copas de Oviedo (ABACO) acudirá la próxima semana a una reunión con el Principado. El sector ve en el encuentro que mantendrá con el director general de Comercio, Emprendedores y Economía, Julio González Zapico, una de las últimas oportunidades de convencer a la administración de la necesidad de un rescate para sus negocios, que temen no poder hacer frente a la devolución de los créditos públicos recibidos tras la declaración del estado de alarma.
El encuentro estaba previsto inicialmente ayer, pero un problema de agenda llevó a posponerlo para la próxima semana. Con el objetivo de hacer más presión sobre el gobierno regional, al encuentro acudirán también las asociaciones empresariales de ocio nocturno de Gijón y Avilés, así como el colectivo de discotecas. "Hay que hacer algo porque la situación es extrema y cuantos más seamos mejor", explicó ayer el presidente de ABACO, Pepe Reina.
Aunque todavía no han acordado una hoja de ruta, la intención de los bares de copas de Oviedo es plantear a González Zapico la posibilidad de recuperar la actividad de los locales nocturnos. Admiten que esta opción parece poco probable con la vuelta de las restricciones de la fase 2 de la desescalada, pero insisten en que si no es así la otra alternativa es un plan de rescate ambicioso. "Si no abrimos es imposible que cubramos los gastos fijos indispensables", argumentan.
En total, los asistentes a la reunión representan a unos 200 establecimientos de toda la región, de los que más de medio centenar se ubican en el casco histórico de Oviedo. Pese a las adversidades, los primeros contactos del sector con González Zapico les hacen tener cierta esperanza. "Ya nos advierte de que los recursos públicos son escasos, pero está interesado en ayudarnos en la medida que sea posible", explican.
El principal objetivo es salvar el máximo número de puestos de trabajo y empresas de cara a una futura reapertura a pleno rendimiento una vez superada la pandemia. Desde el inicio de la crisis, la asociación ABACO se ha mostrado dispuesta a pactar medidas para garantizar un mínimo de ingresos para el sector, pero lejos de recibir una respuesta afirmativa a sus propuestas, a mediados de agosto se toparon con el cierre definitivo de sus locales por orden del ministerio de Sanidad.
Los bares de copas consideran "muy injusta" la decisión ministerial pues, a su juicio, "criminaliza" a un sector que, al menos en el caso de Oviedo, no ha sido origen de ningún foco de contagios desde el comienzo de la pandemia. Atender en las mesas con horarios razonables y registrar el nombre de los clientes son algunas de las ideas que lanzaron sin éxito con respaldo incluso del Alcalde de Oviedo, el popular Alfredo Canteli. Los establecimientos reclamaban poder abrir cobrando entrada y pidiendo los datos personales de todos los clientes para facilitar el control de posibles contagios.
Sobre las ayudas, que vendrían muy bien al sector, los empresarios apuntan a la urgencia de aplazar el inicio de la devolución de los créditos del Instituto de Crédito Oficial (ICO) a los que tuvieron acceso. También reclaman fondos para poder hacer frente al pago de alquileres y otros gastos directos generados por los locales al menos durante el tiempo que dure el cierre total del ocio nocturno decretado por las autoridades sanitarias del estado.
