La revisión del Plan General de Ordenación (PGO) de Oviedo actualmente en marcha pretende facilitar la construcción residencial en aquellos ámbitos en los que se detecte interés de los propietarios o de los promotores, pero sin embargo descarta de plano la creación de suelo industrial en el municipio. Es lo que avanza el concejal de Urbanismo, Nacho Cuesta (Cs), quien considera que el espacio ya catalogado para la implantación de empresas en el concejo resulta suficiente para hacer frente a las necesidades presentes y futuras. El edil aboga por reorientar los terrenos disponibles a unas actividades "de corte más moderno, ligadas a la tecnología, al I+D o al ámbito biosanitario".
La antigua fábrica de armas de La Vega, donde la Cámara de Comercio ha planteado la creación de un polo ligado a las ciencias de la salud, ya es suelo industrial, por lo que no será necesario abordar la recalificación de aquellas zonas del recinto que pudieran destinarse a ese uso. Lo mismo sucede con la Fábrica de Gas, cuya adquisición negocia el Ayuntamiento. A falta de cerrar la operación, también podría destinarse, aunque fuera parcialmente, a acoger a las pymes y emprendedores del eje biosanitario que se está generando en torno al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y que buscan espacio para implantarse a la vista de que el Vivarium de La Corredoria está lleno.
Oviedo tiene cerca de 900.000 metros cuadrados de suelo calificado como industrial y aún queda terreno disponible y áreas pendientes de desarrollo. Se ubican, fundamentalmente, en Olloniego, Anieves, Trubia, Tudela Veguín, San Claudio o el área de Cerdeño, sin contar las grandes posibilidades que se abren con la fábrica de La Vega en caso de que, finalmente, se alcance un acuerdo con Defensa para poner la parcela a disposición del Ayuntamiento. "Ante estas razones, en la redacción del nuevo Plan General mantendremos sustancialmente los usos industriales ya contemplados en el documento de 2006", confirma el responsable del área de Urbanismo. Nacho Cuesta entiende que se trata de un planteamiento "razonable", toda vez que -añade el concejal- "en estos momentos no hay demanda ni voluntad de crear nuevos grandes espacios industriales en nuestro municipio".
Frente a las actividades más tradicionales que no acaban de encontrar demasiado tirón en Oviedo, la intención de Urbanismo es reorientar los espacios industriales disponibles a una economía basada en la tecnología y la innovación. "Abogamos por desarrollar las zonas existentes con actividades industriales relacionadas con el conocimiento o esos usos biosanitarios que se podrían plantear para La Vega", subraya Cuesta. Aunque el edil reconoce que Oviedo "siempre ha sido una ciudad más enfocada al sector comercial, de servicios y administrativo, y esa sigue siendo su vocación, no renunciamos a convertirlo en un polo de atracción de nuevos modelos de industrias innovadoras, modernas y de calidad". "La modificación del PGO, que ya tenemos bastante avanzada, irá de la mano de las necesidades reales de nuestra ciudad", sentencia el edil.
En ese modelo industrial basado en la innovación por el que apuesta Oviedo desempeña un papel fundamental el HUCA en cuyo recinto se ubican la Fundación para la Investigación y la Innovación Biosanitaria del Principado de Asturias (FINBA) y el Instituto de Investigación Sanitaria del Principado de Asturias (ISPA). Ese eje se va ampliar en el plazo de un par de años con el traslado desde Villaviciosa a La Corredoria del Instituto de Productos Lácteos de Asturias (IPLA). Se trata de un polo de conocimiento que ha dado el salto al ámbito internacional y que necesita espacio para expandirse, a la vista de que el vivero de Ciencias de la Salud (Vivarium) está completo. El concejal de Economía, Javier Cuesta (PP), reconocía el domingo en LA NUEVA ESPAÑA "un serio problema de techo empresarial" para favorecer este tipo de iniciativas. A su juicio, los espacios de oportunidad que se van a generar en la capital (La Vega, el viejo HUCA y la Fábrica de Gas) deben satisfacer esa carencia.
La Cámara de Comercio de Oviedo defiende desde hace años que La Vega es el lugar idóneo para instalar incubadoras tecnológicas. Dentro de una estrategia de captación de inversiones de manera coordinada para Asturias en su conjunto, y que estaría basada en "la máxima diversificación empresarial", la entidad sostiene que el sector biosanitario resulta clave para generar empleo de calidad en la ciudad. El entorno del HUCA es ideal para un desarrollo ordenado y creador de empleo de esas características, apuntan desde la Cámara.
Seis empresas, al menos, mostraron interés por ubicarse en La Vega cuando la entidad cameral puso sobre la mesa el proyecto de incubadoras que, en su momento, estuvo en disposición de captar una importante financiación con fondos de la Unión Europea (UE).
