El comercio y la hostelería son esenciales para la economía de Oviedo, motivo por el que LA NUEVA ESPAÑA pretende dar visibilidad al apoyo a estos dos sectores a través de una nueva campaña. El espacio #soisesenciales presenta a los pequeños negocios de la capital del Principado, comercios y locales de restauración, que están siendo muy castigados por las consecuencias económicas de la crisis sanitaria. La campaña cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Oviedo y está abierta a la incorporación de todas aquellas instituciones o entidades que quieran mostrar su respaldo al comercio y la hostelería local.

Los dueños de los pequeños negocios de Oviedo, los propietarios de bares, restaurantes o sidrerías y el resto de los autónomos que se han visto obligados a cerrar sus puertas afrontan un momento crítico. Muchos de ellos echan cuentas y empiezan a considerar tarea dificultosa volver a abrir sus negocios si las administraciones no ponen en marcha planes de ayuda para salir de un pozo que cada vez se hace más profundo. Si la pandemia no se reconduce, comerciantes y hosteleros vaticinan “un futuro muy negro” y “cierres en cadena” en dos sectores cruciales para la economía local.

Santiago Figaredo, hostelero

Santiago Figaredo, hostelero: “Estamos heridos de muerte”

El ocio nocturno está “herido de muerte”, sentencia Santiago Figaredo, que regenta una conocida discoteca en el casco antiguo de la ciudad. En su caso, está a la espera de unas ayudas que no serán la panacea. Por lo menos para los negocios “grandes”. Mira con nostalgia a comunidades vecinas, como Cantabria o Galicia donde siguen bajando los contagios con los locales abiertos.

Juan Noval, tenor

Juan Noval, tenor: “Oviedo es una ciudad musical por excelencia”

El tenor Juan Noval está a la espera de que le “levanten la veda” para volver a cantar. Dice no entender por qué se ha paralizado una de las señas de identidad de la ciudad, la cultura musical. Más todavía si no está demostrado que los teatros sean un foco de contagios. La clave, según él, no es cerrar, que es “lo cómodo”; es organizar “mejor” las cosas que funcionan.

Noemí Rodríguez, modista

Noemí Rodríguez, modista: “Toca rezar para que el año acabe pronto”

En su taller de la calle Mon, Noemí Rodríguez hace ropa por encargo. Con el cierre obligado por el coronavirus le dieron “más caña a la web”. Su gran pérdida este año han sido los mercados a los que llevaban sus prendas para la venta. Pero la modista no se queja. Ahora lo que toca es ser resilente: “Rezar y esperar que el año acabe pronto”. Porque, como dice, 2021 “no puede ir a peor”.