Vecinos de la parroquia ovetense de Villapérez, en la falda de Naranco, hicieron ayer una llamada de auxilio para salvar un camino que está siendo seriamente amenazado por el río Nora a su paso por la localidad de Quintana. Los usuarios habituales del vial señalan que, debido a las inclemencias del tiempo, han quedado descubiertas las tuberías de suministros de la zona y temen que una nueva borrasca pueda dejar inutilizable la calzada.
La situación preocupa especialmente a los residentes de Villapérez que diariamente utilizan esa ruta para desplazarse a sus fincas y realizar actividades agroganaderas. Aseguran desconocer la titularidad de la infraestructura, pero reclaman la sensibilidad de los representantes públicos. “No sabemos si es del Ayuntamiento, el Principado o el Estado, pero pedimos su sensibilidad para buscar soluciones”, señalan los afectados.
Aseguran que el avance del río sobre el asfalto es cada vez más rápido y debido al deterioro algunos vehículos pesados, como es el caso de los tractores, tienen cada vez menos margen para circular. “Tenemos que arrimarnos mucho al lado contrario para evitar caer al río”, señalan muy molestos por el hecho de tener que “jugarse el tipo” a diario.
Para reforzar sus argumentos, los vecinos de Villapérez apuestan por apelar a su derecho a disfrutar de unos servicios públicos dignos a pesar de vivir en la zona rural. “La gente de aquí también tenemos que vivir y desplazarnos para realizar nuestro trabajo”, declaran poniéndose a disposición de los políticos para que visiten la zona y comprueben la magnitud del problema.
