El operario acusado de dejar a medias unas obras de la instalación eléctrica del colegio Amor Misericordioso de Colloto por las que ya había cobrado 32.827 euros negó los hechos durante la vista celebrada ayer en el juzgado de lo penal número 1 de Oviedo. La Fiscalía, por su parte, mantiene que los hechos constituyen un delito de estafa y reclama once meses de prisión para el procesado.
El ministerio público sostiene que el procesado alegó motivos familiares para no acometer la segunda fase de unos trabajos de los que ya había cobrado buena parte por adelantado. El varón niega sin embargo que incumpliera lo acordado y su defensa, a cargo del letrado Armando Santos interesó la libre absolución.
Según la acusación, el operario rechazó seguir con la obra porque la segunda fase de los trabajos era más costosa que la primera y se exponía a perder dinero por haber hecho un presupuesto desvirtuado.
