"La justicia está en una situación límite. Una situación en la que no se encuentra ningún otro servicio público". El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Asturias, Jesús María Chamorro, aprovechó su intervención en los cursos de verano de La Granda para alertar de la precaria situación de la justicia asturiana y, al mismo tiempo, apelar a la "solidaridad" del Rector de la Universidad de Oviedo, Ignacio Villaverde, para que ceda algunos espacios del campus de Llamaquique para posibilitar la unificación de sedes en esa zona de la capital asturiana.
El llamamiento de Chamorro no es nuevo. El presidente del TSJA ya pidió el pasado junio un "esfuerzo" en la misma línea al Rector, el cual respondió asegurando que la institución académica tiene un problema "serio" de espacios que difícilmente le permitirá poder ceder sus dependencias para albergar sedes judiciales. Entonces la petición llegó justo un día después de que la consejera de Presidencia, Rita Camblor, anunciara que el Principado estaba a la espera de conocer el informe de la Universidad sobre la reorganización de sus sedes para saber si la facultad de Ciencias estaría en condiciones de albergar en alguno de sus espacios nuevas sedes judiciales, una vez que parte de sus estudiantes –entre los que se encuentran también los alumnos de Matemáticas– sean trasladados al edificio de Minas, que se quedaría vacío tras el traslado de los alumnos de las titulaciones que alberga actualmente al campus de Mieres.
Camblor subrayó entonces que la utilización de alguna sede universitaria vacía sería la prioridad, aunque abrió la puerta a buscar otras alternativas como el Centro Cívico, en caso de que los informes apunten a la imposibilidad de poder aprovechar otros espacios públicos de Llamaquique para avanzar en la unificación de sedes judiciales de Oviedo.
Chamorro redundó este lunes en dicha idea, dando por hecho que no es viable acometer ahora la construcción de un nuevo edificio capaz de dar respuesta a las demandas de espacios por parte de la justicia asturiana. "Ante la imposibilidad de construir una ciudad de la justicia como en otros sitios es, en tiempos de estrecheces, cuando debemos demostrar solidaridad todos y cooperar y coordinarnos", sostuvo tratando de nuevo de ganarse el favor de Villaverde para dar respuesta a uno de los principales problemas con los que se encuentran a diario los funcionarios de Justicia y ciudadanos que a diario se pasan por el palacio de la justicia de Llamaquique, inaugurado hace 21 años tras cuatro años de obras para su construcción.
El presidente del TSJA incidió, no obstante, en la predisposición a buscar una "solución pactada" entre instituciones, pues considera que sería positivo para el interés general. "Hay posibilidad y es necesario un esfuerzo por parte de todos", defendió con motivo de una conferencia en la que presentó a la justicia como el servicio público que presenta un peor estado en la actualidad.
