El Covadonga acabó su racha de tres derrotas consecutivas con una victoria de las importantes. Los de Fermín ganaron al Marino a domicilio y lo consiguieron cuando estaban con diez en el campo. El autor del tanto definitivo fue el veterano Jandro.
-¿Cómo fue el partido de Miramar?
-Un poco rocambolesco, con muchas incidencias. Empezó con el problema del linier, que sufrió un pinchazo, se paró el partido y en la segunda no pudo seguir y se quedó una banda sin linier. Después se paró el partido por nuestro portero, que se rompió una bota y tardó bastante porque le tuvieron que ayudar; se volvió a parar otros cinco minutos cuando lo expulsaron. Por eso hubo que añadir diez minutos y el campo se quedaba sin luz, terminamos jugando a oscuras y al pitar el final el árbitro también se lesionó. Fue muy diferente una parte de la otra. En la primera ellos fueron superiores, pero después de la segunda creo que la victoria fue merecida.
-Necesitaban ganar tras tres derrotas, ¿no?
-Tuvimos un bache de tres derrotas, para mí dos de ellas inmerecidas. La de Luanco fue un victoria importante porque fue en un campo difícil y nos sirve para seguir peleando. El entrenador nos decía que no nos metiéramos cosas raras en la cabeza, que estamos haciendo una temporada buenísima.
-¿Qué objetivo se marcan?
-El presidente nos pidió mejorar lo de la temporada pasada, estar entre los siete y ocho primeros. Yo creo que podemos luchar por entrar en promoción si tenemos suerte y no hay muchas lesiones.
