"Nos ha faltado profundidad y acierto en los metros finales". Fue una de las lecturas, la única que dijo abiertamente, del entrenador del Oviedo, Juan Antonio Anquela, después de la derrota de los azules en el Wanda ante el Rayo Majadahonda (1-0). La caída en Madrid dolió en el vestuario azul, que ve el siguiente partido, mañana ante Osasuna en el Tartiere (16.00 horas) como una "final", según dijeron esta semana Sergio Tejera y Javi Muñoz. Anquela ha ensayado estos días en El Requexón con el sistema de carrileros, al que podría regresar mañana, pero hay otro factor del juego, que no es el dibujo, que parece preocupar más al jienense para intentar la segunda victoria en el feudo carbayón: los balones perdidos. El Oviedo es el equipo de Segunda que más pases falla (1.003), algo imprevisto a estas alturas de campeonato. Las pelotas extraviadas son el talón de Aquiles de un Oviedo que aún busca su identidad en el campeonato. El impulso de Anquela es el de reforzar la zaga, así lo hizo ante el Albacete, para evitar que esas pérdidas le generen mayores problemas a los azules. El sistema de tres centrales puede ser un antídoto al problema. Pero la fuga de balones es un asunto a tratar con celeridad. Esa falta de imprecisión contrasta con la idea forjada desde la pretemporada, la que decía que el Oviedo sería este curso mandón con la pelota. El Oviedo comanda una clasificación de pases fallados en la que le siguen Osasuna, rival del mañana, con 982 envíos erróneos; Alcorcón, 963; Las Palmas, 939; y Almería, 937. Los errores en la entrega de los futbolistas azules están bastante repartidos, aunque se orientan al flanco izquierdo. Saúl Berjón es el jugador que más balones ha perdido, con 143. Mossa es el segundo, con 105. Tras los dos integrantes habituales de la banda zurda, están Christian Fernández (97 pases fallados), Johannesson (85) y Tejera (72). No obstante, la medular es la zona caliente que explica las pérdidas del Oviedo y precisamente esta semana Anquela ha incidido en ese aspecto y también en los fuertes de Osasuna, indicando una y otra vez lo importante de tapar la salida del centrocampista rojillo Fran Mérida.
Tampoco son lucidos los números azules si se analiza el número de posesiones perdidas (concepto más amplio que los pases, en los que entran las interrupciones del juego, faltas, balones en largo, saques de puerta...). En ese campo, Osasuna es el que presenta peores registros. Con 1.507 posesiones malogradas. El Oviedo es segundo, con 1.501. Les siguen a los rivales del sábado en el Tartiere: Almería (1.455), Alcorcón (1.408) y Las Palmas (1.383), los mismos equipos, aunque en diverso orden, que si sitúan en el top-5 de pases fallados.
Si se analiza el juego del Oviedo partido a partido se ve la inferioridad azul a la hora de jugar la pelota. Los de Anquela se han acostumbrado a perder más balones que el rival este curso. Solo en dos ocasiones han mejorado los registros del rival. El Oviedo ha perdido más pelotas que el contrario en siete duelos ligueros: ante el Extremadura (159-158), en Cádiz (178-204), frente al Zaragoza (143-129), ante el Elche (189-180), en Alcorcón (148-184), contra el Albacete (158-157) en el Wanda frente al Rayo Majadahonda (157-165) y, además, en el duelo copero de Mallorca (146-161). Los azules sí fueron más precisos en los choques de Córdoba (161-152) y Lugo (148-131). Tampoco el índice de balones recuperados le da un empujón. Solo en dos choques, el Oviedo ha recuperado más balones que su rival: contra el Extremadura (69-51) y ante el Zaragoza (57-47). En el resto de citas, incluida la Copa, el Oviedo ha sido inferior en las recuperaciones.
Un duelo con fugas. Mañana en el Carlos Tartiere se espera un partido de fallos. Oviedo y Osasuna ocupan los primeros lugares de las tablas de pases fallados y de posesiones perdidas. Tampoco parece que el escenario, viendo los antecedentes, ayude a lucir la mejor versión de los dos bandos. El Oviedo tiene unos números en el Carlos Tartiere mejorables: 5 puntos. Solo hay cuatro equipos con peores números: Lugo, Extremadura, Nàstic (los tres con cuatro puntos) y Reus (dos). Peor le van las cosas a Osasuna a domicilio: sólo suman un punto de doce gracias al empate (1-1) ante el Zaragoza en La Romareda hace dos semanas. Solo el Córdoba (0 puntos) está en una situación peor.
