Y en el momento en el que las cosas parecen mejorar, un refuerzo de lujo. Un elemento que tiene que sumar más de lo que lo ha hecho esta temporada: el Carlos Tartiere. Fuente de alegrías en las temporadas de festejos e imán para las desgracias en una campaña con más problemas de los que todos esperaban. El Oviedo aún está a tiempo de maquillar sus números en casa y en los próximos 15 días tiene una oportunidad de oro: los de Ziganda reciben de forma consecutiva a la Ponferradina y al Deportivo de la Coruña en el municipal ovetense y la intención es la de buscar un pleno que permita al equipo alejarse de la zona roja de la clasificación.
La Ponfe es el primer en pasar por Oviedo. Como en la hoja de ruta diseñada por Ziganda solo importa la siguiente parada, el pensamiento de los azules no va más allá de las dificultades que pueden plantear el equipo berciano en el duelo del sábado (18.15 horas). La Ponferradina llegará a Oviedo tras caer ayer en Tenerife (1-0) aunque en una situación cómoda en la tabla: es décimo con 40 puntos, 5 por encima del Oviedo y de los puestos de descenso. El play-off se le ha escapado a 6 puntos esta jornada.
Llegará además al Tartiere con una cifra que juega en su contra: solo ha sumado 11 puntos (2 victorias y 5 empates) como visitante en lo que va de competición. Lo que le convierte en el peor equipo fuera de casa de Segunda División. Yuri pone el peligro de los bercianos en cada balón que ronda el área, como demostró en el choque de la primera vuelta: victoria local por 2-1.
Más dramático parece a priori el duelo del sábado 21 de marzo (18.15 horas) otra vez ante el respetable carbayón. El Deportivo ve cómo el efecto Fernando Vázquez va poco a poco apagándose y esta semana ha regresado a los puestos de descenso tras caer con contundencia en Almería: 4-0.
Con la derrota del sábado, los coruñeses acumulan 4 jornadas sin ganar, 2 puntos de 12 posibles, y su rendimiento a la baja ha dado con otra situación de urgencia. Son el conjunto más goleado de la categoría (46 tantos) y ha sumado 14 puntos fuera de su estadio, uno menos que el Oviedo hasta ahora.
En juego estará, además, el goal-average particular entre los dos contendientes, un factor que puede ser decisivo en la definición de los descensos. En el encuentro de la primera vuelta, el Dépor se impuso por 3-2, jornada inaugural, por lo que el Oviedo debe ganar para, por lo menos, igualarlo.
El club podría decidir lanzar propuestas similares a las de las últimas semanas (entradas de acompañante a cinco euros) con el objetivo de que el Tartiere vuelva a vestir sus mejores galas y se sitúa la asistencia otra vez por encima de los 16.000 espectadores, como en las últimas ocasiones.
