Cara y cruz para el Oviedo de cara al futuro inmediato. El equipo azul volvió ayer al trabajo en El Requexón tras el empate ante el Girona (0-0) en una suave sesión regenerativa que llegó con buenas noticias para los azules. Pierre Cornud, que se retiró durante el partido ante el Girona renqueante, estuvo en el gimnasio y las primeras observaciones médicas han descartado una lesión de gravedad, según informaron ayer fuentes del Oviedo. De hecho, está previsto que el lateral izquierdo francés esté presente mañana en la ciudad deportiva en la vuelta al trabajo de los azules tras el día de descanso de hoy para empezar a preparar el partido del sábado ante el Zaragoza en La Romareda (18.15 horas, Movistar).
El buen estado físico de Cornud, que se retiró con un gesto de dolor que hizo presagiar lo peor, es una gran noticia para Ziganda teniendo en cuenta además el buen momento de forma que atraviesa el galo. De su conexión con Borja Sánchez por la banda izquierda nacieron buenas oportunidades para el Oviedo y, hasta el momento, Cornud está siendo una pieza fija en los planes del Cuco. Ante el Girona el lateral hizo uno de sus mejores partidos con el equipo azul: puso hasta ocho centros. El galo es el segundo mejor centrador de toda la Liga, con 21 envíos al área que acabaron en remate. Contra los catalanes le puso un balón de gol a Obeng que se fue por encima de la portería, en la que fue la ocasión más clara de los azules en el partido del sábado. La cruz de la semana del Oviedo está en el ataque carbayón tras la expulsión de Obeng después una entrada a Calavera a falta de tres minutos para el final del partido ante el Girona. Tras el calentón inicial, el vestuario azul asume la expulsión, que llegó después de la intervención del VAR.
El club azul espera que se quede en un partido de sanción y que Obeng, “pichichi” azul, se pierda únicamente el duelo ante el Zaragoza y pueda jugar el primer derbi asturiano ante el Sporting, el sábado 9 de octubre a las 21.00 horas. El club no tiene pensado recurrir la roja al ghanés. La ausencia de Obeng trastoca los planes del Cuco, que para jugar en Zaragoza deberá decidir si seguir con el 4-4-2 o cambiar el sistema. Si apuesta por dos arietes, Matheus podría tener su turno.
El club estará pendiente esta semana de la posible sanción disciplinaria a Rubén Reyes, director deportivo azul. El colegiado madrileño Gálvez Rascón recogió en el acta que el asturiano se dirigió a él al final del partido diciéndole lo siguiente: “Qué vergüenza, tenéis que mostrar respeto por este club”. El director deportivo azul se podría enfrentar a una sanción de un mínimo de dos partidos, según el artículo 117 del Código Disciplinario. Reyes no podría acudir a la zona del banquillo ni a los vestuarios, y el club haría frente a una multa económica. La entidad no recurrirá lo reflejado en el acta.