El “caso Joni Montiel” avanza a pasos agigantados hacia la mesa de Rubén Reyes, director deportivo del Oviedo. El mediapunta azul no está contando con la participación esperada en el momento de su fichaje y el club carbayón ya asume que si la situación no cambia de aquí a diciembre el jugador hará las maletas antes de tiempo. Mientras tanto, el futbolista ha optado por no expresar en público descontento, apretar los dientes en intentar ganarse el puesto en los entrenamientos. Pero sus números son preocupantes.
Montiel, cedido por el Rayo Vallecano, solo ha disputado un partido de titular con la zamarra carbayona. En total, ha participado en siete encuentros de los quince que ya se han jugado esta campaña. Acumula solo 169 minutos, el 12% del total. No era el plan trazado por la dirección deportiva ni lo que esperaba el jugador.
La situación de Montiel cobra especial trascendencia dentro del club teniendo en cuenta los entresijos de su llegada en verano. Fue Rubén Reyes el que apostó sin dudar por el futbolista, de 23 años. El director deportivo del Oviedo lo conocía bien de su etapa en el Rayo Vallecano y opinaba que podría aportar un perfil de calidad necesario para el equipo del Cuco Ziganda. La reconstrucción del conjunto carbayón pasaba porque Montiel fuese piedra angular del proyecto. Él, junto con Borja Sánchez y Sangalli, sería el encargado de encender la chispa en el ataque. En las oficinas del Oviedo no había ninguna duda de que así sería.
Más aún teniendo en cuenta el sistema favorito del Cuco en la pretemporada: el 4-3-3. Un dibujo que le venía a Montiel como anillo al dedo por su posibilidad de adaptarse al centro del campo y también a las dos bandas si fuese necesario. La realidad es que tras casi cuatro meses de curso el Cuco no parece confiar en las capacidades del jugador madrileño. Además, la comunicación entre el técnico y el futbolista es prácticamente nula en el día a día, según apuntan fuentes desde el vestuario del Oviedo.
El distanciamiento va en aumento. También el “lógico” descontento del futbolista, según observa un compañero de Montiel. El club conoce las sensaciones del mediapunta. En el vestuario ponen de ejemplo su “intachable” comportamiento en El Requexón. El jugador no está dispuesto a dejarse ir en los entrenamientos y así perder la forma física.
Varios equipos están muy atentos al futuro de Montiel, un jugador con calidad que sin embargo no ha logrado asentarse en el fútbol profesional desde su debut en Primera con el Rayo Vallecano, en febrero de 2016. Hay un dato llamativo: el mediapunta ha jugado 67 partidos entre Primera y Segunda División y solo ha sido titular en diez ocasiones. El curso pasado únicamente salió de inicio en dos partidos con el Rayo Vallecano: ante el Cartagena y frente al Tenerife. Esta temporada, con el Oviedo, su oportunidad le llegó en la derrota ante el Burgos. Jugó 58 minutos y no volvió a participar hasta el pasado partido ante Las Palmas, cuando salió para jugar en los últimos instantes. Reyes confiaba en que la falta de continuidad que Montiel ha tenido en su carrera se solucionase en el Oviedo, necesitado en verano, según la dirección deportiva, de futbolistas que aportasen control de juego. No ha sido así con el Cuco al frente.
Hombres como Obeng, Viti, Sangalli y Borja Sánchez están por delante de Montiel en el escalafón.
